Alexis Blancas/Redacción
Desde las 6 de la mañana, maestros y padres de familia tomaron las instalaciones de la escuela primaria “Ignacio Manuel Altamirano” ubicada en la colonia PRD, exigiendo la destitución de Irais Apareció Villa, directora del plantel, a quien acusan de acoso laboral, de pegarle a los estudiantes y el mal uso de recursos públicos que la institución ha obtenido y ella no ha comprobado.
Comentaron que son 500 mil pesos los que la directora del plantel no ha comprobado y hasta el momento las únicas adecuaciones que se le han hecho al plantel son unos baños y una cisterna, los cuales consideran innecesarios, puesto que los construyeron en una mala ubicación, así como una loza que se está hundiendo.
Además de esto informaron que no entrega cuentas del comedor, del que aproximadamente son 600 pesos diarios los que obtiene de recurso.
Exigieron a las autoridades que hagan caso a sus peticiones, pues son 290 alumnos los que están sin recibir clases.
También pidieron al secretario de educación en guerrero, Marcial Rodríguez Saldaña y a las autoridades educativas, que no sigan protegiendo y pasando por alto está acciones que solo perjudican a la comunidad estudiantil de ese plantel.
La trifulca sucedió cuando personal del área jurídica del gobierno estatal llegó hasta dicho punto, para iniciar un diálogo que no llegó a buenos términos.
Los grupos, uno a favor y otro en contra de la directora, se acusaron de no tener razón afuera de este plantel, y luego se suscitó un conato de bronca que llegó hasta los golpes.
La trifulca provocó que los estudiantes no tuvieran clases y presenciaran cómo los adultos se enfrentaban a puntapiés, puñetazos
y finalmente los tirones de cabello y golpes.
En medio de los golpes quedaron niños, algunas de las madres de familia usaron palos y los funcionarios quedaron completamente rebasados, sin alcanzar a intervenir.
Jaret Bello Nájera, maestra de la primaria, responsabilizó de los hechos a la depuesta Aparicio Villa, ya que argumentó, llevó un grupo de choque integrado por vecinos de colonias aledañas y de la comunidad del Palmar, municipio de Leonardo Bravo.
Después del enfrentamiento llegó una patrulla de la Policía estatal, y Irais Apareció Villa declaró a los agentes que querían privarla de su libertad y luego se resguardó en una casa particular para evitar que las cosas se complicaran más.