• El secretario de Finanzas advirtió que varios ayuntamientos “nos han pedido préstamos, pero no estamos en condiciones de poderlos apoyar; primero debemos de cubrir nuestras propias necesidades”

Jesús Saavedra

Luego de informar que el gobierno estatal gestionó un préstamo de mil 500 millones de pesos para pagar salarios y aguinaldos de los trabajadores este fin de año, el secretario de Finanzas y Administración, Raymundo Segura Estrada, advirtió que el gobierno del estado no está en condiciones de apoyar con préstamos a una decena de gobiernos municipales que lo han solicitado.

Este lunes, el titular de la Sefina aceptó que “hay solicitudes de préstamos” por parte de varios Ayuntamientos, “pero no estamos en condiciones de otorgarlos, tenemos que resolver nuestras propias necesidades como el pago de salarios y aguinaldos de fin de año”.

Segura Estrada informó que “se realizó un proceso de licitación y obtuvimos un crédito bancario de mil 500 millones de pesos, y haremos una segunda evaluación considerando qué otros compromisos vienen y poder enfrentarlos”.

Explicó que son 10 los ayuntamientos que han solicitado al gobierno del estado préstamos para solventar sus compromisos de fin de año, entre ellos el de Chilpancingo. “Nos han pedido préstamos, pero repito, no estamos en condiciones de poderlos apoyar. Chilpancingo tiene muchas prioridades, pero primero debemos de cubrir nuestras propias necesidades para poder después ayudar a los municipios”, precisó.

Sobre las camionetas blindadas que está vendiendo el gobierno estatal a través del Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado, Segura Estrada dijo que “están realizando el esfuerzo de poder venderlas, solo 7 se vendieron y estamos esperando el tiempo suficiente y si no tendremos que recuperarlas para que las podamos vender nosotros”.

Indicó que esas camionetas se encuentran bajo resguardo en Chilpancingo, “si hay necesidad de presentarlas físicamente las podemos mostrar; mantenimiento no se les da, porque no están activas y peor es utilizarlas porque se gasta mucho recurso en mantenimiento, gasolina y están paradas esperando que pronto sean vendidas. Estamos hablando de unas 30 unidades”.

Después admitió que la Casa Acapulco “no se puede vender, (porque)hay una situación legal; el caso de la Casa de Guerrero en la Ciudad de México no hay todavía un proceso de documentar para poderla ofrecer. Se piensa vender y utilizar un pequeño espacio para que se siga teniendo una casa en la Ciudad de México, pero no con esa magnitud que se tenía, No va a desaparecer la representación, se va a minimizar con el propósito de reducir los gastos que ocasionan”, finalizó.