• Comisario de Unión de las Peras asegura que “no nos han tomado en cuenta, somos una comunidad de 125 familias que fuimos reubicados en este paraje conocido como La Venta”

Jesús Saavedra

UNIÓN DE LAS PERAS.— Habitantes de esta comunidad indígena del municipio de Malinaltepec, le pidieron al presidente Andrés Manuel López Obrador que atienda sus peticiones de obras para más de un centenar de familias que fueron reubicadas tras las lluvias que provocaron las tormentas ‘Ingrid’ y ‘Manuel’, en septiembre del 2013.

El sábado, las familias de esta localidad esperaron al presidente durante un recorrido de la Montaña hacia la Costa Chica, en la gira que realizó para supervisar la construcción de caminos artesanales en el municipio de Tlacoapa.

El comisario de esta localidad, Omar Leyva Bruno, explicó que le pidieron una audiencia a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda porque “tenemos unos problemas con la construcción de unas obras que están pendientes”.

Dijo que desde el 13 de diciembre se firmaron unos acuerdos con las autoridades del municipio, pero no se ha avanzado en la construcción de un camino artesanal de 2 kilómetros, porque “dieron preferencia electoral el alcalde Acasio Flores Guerrero y discriminó a quienes no votamos por él”.

Leyva Bruno informó que además está pendiente la introducción de una red de agua potable y una cancha de uso múltiples.

“No nos han tomado en cuenta, somos una comunidad de 125 familias que fuimos reubicados en este paraje conocido como La Venta, el pueblo original está en la parte baja y estamos solicitando servicios básicos”, se quejó.

Los habitantes de esta localidad lograron entregarle un oficio al presidente López Obrador, a quien le regalaron peras y duraznos.

La respuesta fue que “va a atender esta petición la gobernadora, Evelyn Salgado”, quien viajaba con el presidente en su camioneta y dijo que iba a programar la atención de sus demandas.

Piden a AMLO la intervención en conflicto agrario con Alacatlatzala

En el trayecto, López Obrador también fue abordado por habitantes de Malinaltepec que le pidieron su intervención en un conflicto agrario por la posesión de 2 mil 800 hectáreas que sostienen con la comunidad de Alacatlatzala, que ha generado violencia y asesinatos en esta región de la Montaña.

Explicaron que el diferendo agrario representa más del 40 por ciento del territorio de Malinaltepec.

“Queremos paz y que el presidente intervenga de manera directa de más de 50 años de este conflicto, hay sentencias agrarias, pero nuestros hermanos de Alacatlatzala no quieren reconocer y por eso pedimos la intervención directa del presidente”, dijo el presidente del Comisariado de Malinaltepec, Sebastián Ramírez Hernández.

Señaló que los tribunales agrarios han establecido que el conflicto real son mil 300 hectáreas, “no las 2 mil 800 hectáreas que plantean los hermanos de Alacatlatzala. Creemos que a través del diálogo y la buena voluntad de las partes para darle una salida pacífica a este problema”, añadió.

Consideró que “hay terrenos ocupados, huertas de café, siembra de maíz y fríjol, una parte la tiene posesión Malinaltepec y otra parte Alacatlatzala y sus anexos. Nosotros planteamos que respetemos nuestros territorios y tener una delimitación, pero no lo entienden así y por ello necesitamos el apoyo institucional”, explicó.

Recordó que el 1 de noviembre del 2020, tres personas de Alacatlatzala fueron asesinadas, hubo una veintena de personas heridas a tiros y un centenar de viviendas quemadas. “Nos culpan a nosotros, pero no tenemos nada qué ver, por eso pedimos la ayuda del gobierno federal y no esperen hasta que nos partamos la frente y nos volteen a ver, que pacifiquen esta zona”, añadió.

Al presidente le tomó más de 10 horas cruzar la región de la Montaña y salir hacia la Costa Chica, donde supervisó caminos artesanales en los municipios de Tlacoapa, Malinaltepec, San Luis Acatlán e Iliatenco, en eventos cerrados en los que no hubo acceso a reporteros.