- El secretario de Finanzas señaló que las participaciones federales se reducirán entre 30 y 40 por ciento en el segundo semestre del año, debido a la caída en la recaudación a nivel nacional
- Admitió que la situación financiera se complica porque se pagan 245 millones de pesos por préstamos contratados a finales del año pasado, además que el ISSSTE y el SAT retienen otros 120 millones
Jesús Saavedra
Las participaciones federales que recibe el gobierno de Guerrero se reducirán entre un 30 y 40 por ciento en el segundo semestre del año, admitió el Secretario de Finanzas y Administración, Raymundo Segura Estrada, quien recordó que a finales del año pasado y a principios de éste, la actual administración tuvo que pedir préstamos bancarios por 2 mil 450 millones de pesos que se están pagando, lo que ha afectado la operatividad y los programas gubernamentales.
En entrevista radiofónica, el titular de la Sefina explicó que en octubre pasado “recibimos la administración con un déficit de operación de 3 mil 400 millones de pesos para cerrar el año al mes de diciembre, que implicaba pagar aguinaldos y bonos” a los trabajadores y a los maestros.
Segura Estrada recordó que el gobierno de Salgado Pineda tuvo “la necesidad de recurrir a créditos bancarios por 2 mil 100 millones de pesos que fue suficiente para atender esa necesidad”.
Sin embargo, añadió, en enero “estábamos igual y con grandes problemas”, por lo que “tuvimos que recurrir a otro crédito bancario de 350 millones de pesos, y en consecuencia nos ha complicado atender los programas y acciones del gobierno”.
Explicó que parte del presupuesto que reciben mensualmente del gobierno federal “se destina para pagar esos créditos bancarios, son más de 245 millones de pesos mensuales, más intereses”.
Admitió que Guerrero requiere “del apoyo de la federación”, porque además “tenemos adeudos al ISSSTE por 15 mil millones de pesos, lo cual es impagable con nuestros recursos que recibimos mensualmente”.
Además, reveló que existe otra deuda con el Sistema de Administración Tributaria (SAT) por 6 mil millones de pesos, “por retenciones que no fueron pagados en su oportunidad. Ambas instituciones nos hacen retenciones mensuales por 120 millones de pesos, todo ello nos complica la operación del gobierno del estado”, precisó.
Segura Estrada añadió que a nivel federal ha caído la recaudación fiscal y por ello se prevé que para el segundo semestre del año, “las participaciones federales a los estados se va a reducir. En julio, la participación se va a ver reducida por la reducción de captación de impuestos”, dijo.
Señaló que tienen entendido que “la reducción será de un 30 a 40 por ciento, es muy elevado el recorte y debemos seguir trabajando para atender necesidades prioritarias en Guerrero”.
Indicó que la instrucción de la gobernadora es “que el sueldo de los empleados está por delante de cualquier situación. Estamos con un poco de esperanza de que la federación, derivado de las diferencias del precio del petróleo, nos puede apoyar a los estados y pronto tengamos buenas noticias”.
Aseguró que el gobierno estatal espera “que haya algo positivo” y el presidente López Obrador apoye a Guerrero, pero mientras “estamos en una política de ahorro y austeridad republicana”.
Por otra parte, Segura Estrada aceptó que hay problemas con la distribución de las nuevas placas por el incumplimiento del proveedor que contrataron, pero “estamos atendiendo el problema y en análisis jurídico para cancelar el contrato, y otro proveedor pueda entregarnos las placas y lleguen a los municipios; esperamos que en este mes esté resuelto y entregando a los municipios las placas”.
Finalmente, dijo que el gobierno estatal no tiene la capacidad financiera para ayudar a los municipios que tienen problemas para pagar laudos laborales y ejemplificó que la propia administración estatal tiene “900 expedientes activos de laudos que nos generanpasivo de 5 mil 280 millones de pesos. Es una situación generalizada y se acumula cada cambio de administración”, justificó.
Reiteró que “el gobierno del estado no está en las circunstancias de poder ayudar a los municipios, porque tenemos otros compromisos más urgentes que atender, que es el de garantizar el sueldo de los trabajadores”.
Los ayuntamientos “deben generar ahorros para poder atender sus necesidades”, les sugirió.