• Vanessa Otero, coordinadora de Articulación de Acciones para la Erradicación de la Violencia Feminicida, reveló que los homicidios, violaciones y violaciones equiparadas contra mujeres, han aumentado hasta en 8% en lo que va del año

Josefina Aguilar 

La Fiscalía General del Estado (FGE) sigue siendo la que menos feminicidios reporta a nivel nacional, porque de acuerdo a la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim), del total de los asesinatos de mujeres ocurridos este año en Guerrero, solo dos son investigados como tal. 

Al participar en el banderazo de salida de 10 unidades móviles y 15 centros para el desarrollo de las mujeres, la coordinadora de Articulación de Acciones para la Erradicación de la Violencia Feminicida de la Conavim, Susana Vanessa Otero González, expuso que el problema de la violencia contra las mujeres es real, que se debe conocer y reconocer, que además tiene su fundamentación y manifestación en muchas aristas, una de ellas, es la seguridad. 

Informó que en el primer trimestre de este año, en Guerreo se han cometido 6 mil 461 delitos en la entidad contra mujeres, 477 más que en el periodo anterior del 2021. 

Explicó que en lo que va de este año, la Fiscalía de Guerrero solo ha integrado 2 carpetas de investigación por feminicidios, lo que significa que hay un 50 por ciento menos respecto al mismo periodo del año anterior, afirmó la funcionaria. 

Vanesa Otero añadió que hay otros delitos y otras manifestaciones de violencia contra las mujeres que han aumentado, entre ellos el homicidio doloso, que aumentó el 7 por ciento; la violación simple, un 11%, y la violación equiparada, en la que se ubican como principales afectadas niñas y adolescentes, que aumentó 8%. 

“Si no conocemos el problema, si no lo identificamos, y si no lo atendemos continuaremos con esa persistencia y esa tendencia”, sostuvo Otero González. 

Consideró que la única forma de detener esta violencia, es la prevención, partiendo de que la violencia contra las mujeres, es un fenómeno social, y no pude verse solo como un cumulo de delitos o cifras que se reducen a números. 

Señaló que la igualdad de género es un derecho humano fundamental, una base necesaria para un mundo sostenible, pacífico y próspero, “la violencia contra las mujeres y las niñas tiene unas raíces muy arraigadas y basadas en la discriminación por razones de género, en normas sociales y pautas culturales que han aceptado y naturalizado la violencia y a los estereotipos de género como su base fundamental para poder lograr y permear en todas las estructuras sociales”.