Ana Lilia Torres  

La diputada local, Gabriela Bernal Reséndiz levantó la voz en el Congreso para exigir un alto a la campaña de odio contra los diputados federales que piensan diferente en torno a la propuesta de Reforma Eléctrica, presentada por el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.

La legisladora local por el Partido Revolucionario Institucional, condenó las acciones de quienes incitan al odio y demeritan el quehacer de los representantes del Poder Legislativo que no aprobaron las propuestas de modificación a las leyes y señaló que la pluralidad y diversidad de pensamientos y decisiones permiten dignificar la convivencia democrática.

Citando la frase del expresidente Benito Juárez, que dice “Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”, Bernal Reséndiz exhortó a todas aquellas personas que emprendieron la campaña de odio y descalificación a ponerse a trabajar, a cumplir con las tareas que les corresponde como legisladores tanto locales, como federales y a no preocuparse por solo cumplir líneas y satisfacer caprichos. ” ¡Traidores a la patria! Es la forma en que algunos han querido denostar y calificar a quienes no están a favor de sus ‘ideas’, pero se les olvida que la patria somos todas las mexicanas y todos los mexicanos”, expresó.

La legisladora dijo que México “es nuestra tierra y aquí vale hacer la pregunta, ¿Quién es más traidor a la patria? ¿Quién ataca a las y los mexicanos por defender a un solo hombre y sus ideales?, ¿Quién promete para alcanzar el poder y no cumple?; o ¿Quiénes con diálogo y formas pretenden construir acuerdos en favor de México y su población?”.

“No, nos equivoquemos, México y la patria somos todas y todos, nuestra lucha no es entre nosotros, nuestra lucha es contra la pobreza, contra la marginación, contra la violencia, contra la desigualdad y la batalla que nos toca dar es con debate, con argumentos, construyendo en favor de México”, señaló enérgicamente la diputada.

De igual manera, Bernal Reséndiz, señaló que la reforma energética así como el dictamen propuesto por el Ejecutivo Federal carecía de sustento científico, la cual fue cubierta “con una careta de buenas intenciones para ocultar la ambición y el capricho” personal.

Sin embargo  la opinión de especialistas sentenciaban que la reforma incrementaría los precios de la electricidad y se volvería más lenta la transición energética de nuestro país, además violaría los acuerdos internacionales y arriesgaría la salud de la población.

Cerró su participación respondiendo a quienes le antecedieron que “traicionar a la patria es abandonar a las mujeres a su suerte”.