- Hay una disminución respecto de los 37 que fueron asesinados en 2020, informó esa organización que documenta esa estadística
Causa en Común, organización de la sociedad civil, reportó que en Guerrero fueron asesinados 26 elementos de diversas corporaciones policiacas el año pasado.
Esto representa una disminución respecto a 2020, cuando se registró la ejecución de 37 uniformados.
Las cifras de 2021 igualaron al 2019, pero en 2018, cuando empezó el conteo, hubo 44 casos.
Cabe destacar que en la entidad también operan fuerzas rurales como los llamados policías comunitarios, quienes se arman ante la desconfianza de la Secretaría de Seguridad o las mismas Fuerzas Armadas. Incluso, para combatir al narco y grupos paramilitares.
En diciembre reciente, por ejemplo, fue ejecutado Vicente” N, autodenominado comandante de la Policía Comunitaria de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), quien perdió la vida en el municipio de san Marcos.
La víctima fue herida con un arma de fuego a las afueras de su casa en la colonia Zapata. Así, ante esta situación, llegaron al sitio las autoridades estatales.
Sin embargo, uno de los familiares del afectado no permitió que los elementos de la Policía Ministerial realizaran las primeras indagatorias e impidió que el cuerpo fuera trasladado al Servicio Médico Forense.
Previamente, el 9 de diciembre, elementos de la la Policía Investigadora Ministerial, Guardia Nacional, Policía Estatal y Municipal llevaron a cabo un operativo en las comunidades del municipio Juan R. Escudero para encontrar a Marcos “N” y Julio Alberto”N”, quienes pertenecían a la Policía Comunitaria del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG).
Además, se puntualizó que Salvador “N”, el ex consejero de la FUSDEG también se encontraba desaparecido desde la mañana previa a la búsqueda.
Respecto a las primeras indagatorias del paradero de Marcos y Julio Alberto, el organismo institucional remarcó que ambos salieron del puesto de seguridad ubicado en el poblado de Palo Gordo, sobre carretera federal Chilpancingo-Acapulco.
Pero, mientras iban en camino a comprar agua a un punto conocido como Las Ladilleras, fueron interceptados por un grupo de personas armadas que los privaron de su libertad en un vehículo tsuru, color rojo. Hasta el momento se desconoce la ubicación de las víctimas.