• “Los guerrerenses no podemos permitirnos empezar cada seis años”, afirmó el gobernador al rendir su 6º Informe de Gobierno, y recomendó “evitar el desbordamiento de las pasiones políticas, que han sido saltos hacia atrás”
  • Afirmó que gobernó de tiempo completo porque “es deber del mandatario responder con oportunidad a los problemas de Guerrero, que, o se atienden de inmediato, o se vuelven lumbre que termina por incendiar a todos”
  • “En estos seis años, disminuimos la deuda pública estatal de más de 2 mil 300 millones de pesos a mil 348 millones de pesos”, destacó

Gilberto Guzmán

“Entregaré un estado con menos problemas y mas oportunidades”, expresó el gobernador Héctor Astudillo Flores durante su 6º y último informe de gobierno, en el que también advirtió que la próxima administración estatal enfrentará “una severa escasez de recursos” para atender problemas como el Covid-19 y sus secuelas, por lo cual espera que el gobierno federal brinde los apoyos necesarios para responder a las demandas de los guerrerenses.

Este jueves en la Sala de la República de Casa Guerrero, el mandatario guerrerense emitió un mensaje ante la presencia del doctor Víctor Manuel Villalobos Arámbula, secretario de Agricultura y Desarrollo Rural y representante del presidente Andrés Manuel López Obrador, y los representantes de los poderes Legislativo y Judicial, Eunice Monzón y Alberto López.

Acompañado de su esposa, la presidenta del DIF Guerrero, Mercedes Calvo, el gobernador Héctor Astudillo indicó que este último año fue “de continuidad en favor del crecimiento y el empleo, un año en el que mantuvimos como la más elevada prioridad a la familia guerrerense”.

Astudillo Flores hizo un reconocimiento a todo el personal de salud que ha trabajado en la atención a la pandemia del Covid-19, así como a quienes forman parte del Seguro Social, del ISSSTE, la Secretaría de Educación, la Secretaría de la Defensa Nacional, y de la Marina.

Dijo que el último año de su administración estuvo marcado por el compromiso inquebrantable para hacer retroceder a la violencia y a la inseguridad, y que culmina un sexenio de esfuerzos para recuperar la gobernabilidad y la estabilidad en Guerrero.

“Un año en el que seguimos trabajando para sanar el tejido social y construir una sociedad más igualitaria, un año de continuidad en favor del crecimiento y el empleo, un año en el que mantuvimos como la más elevada prioridad a la familia guerrerense”, afirmó.

Astudillo Flores subrayó que en su administración, el delito de lesiones dolosas se redujo en casi 22 por ciento y el robo de vehículos cayó 49 por ciento.

Destaca recuperación de la gobernabilidad

El gobernador recordó que cuando inició su administración en octubre de 2015, la situación de Guerrero era crítica y alarmante, porque todos los indicadores de seguridad pública lo ubicaban como una de las entidades menos pacíficas del país.

Además de las protestas sociales derivadas de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, que impedían el adecuado funcionamiento de las instituciones de gobierno.

Expuso que al concluir su mandato “ya no tenemos el indignante primer lugar nacional en homicidios” y se redujo el número de víctimas del secuestro en un 78 por ciento, según datos del gobierno federal.

Añadió que en su administración, el delito de lesiones dolosas se redujo en casi 22 por ciento, el robo de vehículos cayó 49 por ciento, bajaron los delitos de alto impacto, como los homicidios y los secuestros, indicó.

Dijo que falta mucho por hacer en materia de seguridad, y reconoció el apoyo de la sociedad civil, de los ayuntamientos, y especialmente de la federación.

Apuntó que la recuperación de la seguridad ha sido posible en buena medida gracias a las Mesas de Coordinación para la Construcción de la Paz.

Destacó que los resultados positivos son gracias a la inversión realizada en el mejoramiento de los cuerpos policíacos, “entregamos con oportunidad y suficiencia, el suministro de uniformes, equipo táctico, pertrechos y vehículos. Promovimos importantes mejoras salariales y de previsión social para los miembros de los cuerpos policiales”.

Además, se puso en marcha el Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo de Acapulco (C-5).

Astudillo Flores subrayó la importancia de garantizar seguridad para las mujeres, como estrategia para fortalecer la paz social y la armonía familiar, y afirmó que en su gobierno se redujo sensiblemente el feminicidio.

“En 2015, dato muy importante, éramos el primer lugar en feminicidio. Hoy, ocupamos el lugar número 21, de acuerdo con datos oficiales de la federación; la prevención, atención, sanción y erradicación de la violencia contra las mujeres y niñas son temas prioritarios de nuestra agenda”, expresó.

Dijo que se atendió la Declaratoria de Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres, emitida en 2017, y que en las regiones de la Montaña y la Costa Chica se aplicó un programa con varias secretarías y el DIF Guerrero para tratar de evitar, erradicar y disminuir los matrimonios forzados de niñas y adolescentes indígenas a cambio de objetos o dinero.

Se atendieron, dijo el gobernador, 893 movilizaciones sociales y coordinaron 196 mesas de trabajo.

Se reforzó la seguridad en las zonas donde se presentaron conflictos sociales y protestas de civiles armados, autodenominados policías comunitarias.

“Restablecimos las actividades económicas y proporcionamos a sus habitantes los servicios necesarios para atender sus legítimas demandas de seguridad, alimentación, educación y salud”.

Mencionó la coordinación con el Congreso del Estado, en la que se presentaron 11 iniciativas de ley para actualizar el marco jurídico, como la Ley del Centro de Conciliación Laboral y las iniciativas para crear cuatro nuevos municipios.

“En estos seis años, disminuimos la deuda pública estatal de más de 2 mil 300 millones de pesos a mil 348 millones de pesos”, informó el gobernador.

Deja un Estado con menos deuda de la recibida

Héctor Astudillo aseguró que entrega un gobierno menos endeudado del que recibió: “En estos seis años, disminuimos la deuda pública estatal de más de 2 mil 300 millones de pesos a mil 348 millones de pesos. Esto representa una reducción de 43 por ciento en comparación con su nivel inicial. Guerrero es una de las tres entidades menos endeudadas de México, con datos al primer trimestre de 2021”.

Además, dijo que mantuvo la transparencia y la rendición de cuentas como divisas de trabajo: “cumplimos al 100 por ciento las solicitudes de acceso a la información que nos hizo la ciudadanía”.

Espera apoyo federal a próxima administración

Astudillo dijo que entregará “una administración en marcha, por lo cual el próximo gobierno dispondrá de mayores capacidades de operación y acción política”, pero advirtió que también “enfrentará una severa escasez de recursos y una demanda que no puede desatenderse, como es la atención o la continuación de la atención al COVID-19 y sus secuelas”.  

Expuso que en 2020 la emergencia sanitaria ocasionada por el COVID-19 se tradujo en una caída drástica de la actividad económica del país en más de un 8.2% y del 38.7% de los ingresos petroleros que afectaron la recaudación de ingresos presupuestarios federales, la Recaudación Federal Participable y los Recursos Federalizados destinados a las entidades del país

Una menor recaudación federal, explicó, afectó a las finanzas del estado: sólo la recaudación de ingresos de gestión cayó un 21%, 392 millones de pesos de ingresos propios estatales, y las participaciones federales en más de un 8.5%, que son mil 817.17 millones de pesos, respecto a lo programado.

Agregó que en el 2021 el escenario se ha complicado aún más: “las reducciones lamentablemente han continuado. Hemos tenido saldos a cargo de las participaciones por más mil 292.3 millones de pesos y se espera al cierre de este ejercicio, que asciendan a más de mil 800 millones de pesos”.

“Para agravar la situación, en este año ya no se ha contado con el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas conocido como FEIEF, que compensaba la disminución de los ingresos con un apoyo especial para compensar la pérdida de participaciones federales”, añadió.

El gobernador opinó que es deseable que la próxima administración obtenga los apoyos federales necesarios para que, desde su inicio, ofrezca respuestas a las demandas en Guerrero.

Expuso que el cumplimiento de la ley y lograr la paz social no son producto solo de las intenciones, y que para lograrlas el gobernante está obligado a actuar de manera decidida y oportuna.

“Para ello, es indispensable gobernar para todos, lo cual no significa entregar el gobierno a todos, pues esto conduciría a tal dispersión que el poder constitucional se disolvería en la anarquía; (…) el gobierno no es partido político, no es facción ni patrimonio de nadie. Consecuentemente, debe buscar acuerdo en el desacuerdo, solución en el conflicto y diálogo permanente con la disidencia”, precisó.

Astudillo Flores dijo que gobernar es el oficio de la tolerancia y la inclusión: “no se llega a buen puerto agitando las aguas, provocando o buscando las tempestades”.

Recordó la situación del año 2015, cuando las protestas sociales amenazaron la convivencia pacífica en Guerrero, dejando la gobernabilidad en un hilo.

Reconoce apoyo presidencial

“Ocupamos, muchos de los que estamos aquí presentes, los dos primeros años (del sexenio) en estabilizar al estado, fortalecer sus instituciones y hacer dinámica la relación entre los poderes públicos, con los municipios, partidos políticos, organizaciones sociales, de trabajadores y empresariales. El mismo trato sostuvimos con autoridades y representantes de universidades e instituciones educativas, y comunicadores”, señaló.

Astudillo dijo que una prueba de la gobernabilidad alcanzada ha sido la celebración de elecciones pacíficas en la entidad.

“Recientemente se celebraron elecciones en Guerrero y en México se celebró el proceso electoral con normalidad. Los partidos presentaron candidatos y candidatas, expresaron sus propuestas y los ciudadanos y ciudadanas de Guerrero decidieron con su voto. Esta ha sido la elección más amplia y numerosa de la que se tenga memoria en la vida política de Guerrero”, explicó.

El gobernador pidió a la población cuidar su salud, ante la nueva aceleración de contagios de Covid-19: “No es un asunto que ha terminado, es un asunto que ahí está y que amenaza nuevamente con crecer”.

En la parte final de su discurso, agradeció el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador y su disposición de escuchar al pueblo de Guerrero, especialmente a la gente más necesitada, en sus 14 visitas que ha realizado al estado.

“Con el presidente de la República hemos mantenido relaciones institucionales y de mutuo respeto, necesarias para el desarrollo de nuestro querido estado”, dijo.

De igual manera, le agradeció al presidente por designar como su representante en el evento del sexto informe al secretario de Agricultura y Desarrollo Rural del Gobierno de México, Víctor Manuel Villalobos Arámbula, “quien ha sido un aliado en las políticas agropecuarias y especialmente en el programa de Fertilizante Gratuito”.

Agradeció a su esposa, Mercedes Calvo, “su trabajo sin reposo, su solidaridad, su buena fe, su creatividad y su compromiso natural con los guerrerenses”.

También a sus colaboradores, a las diputadas y los diputados de las 61 y 62 legislaturas del Poder Legislativo, “por habernos permitido tener una relación positiva y siempre pensando en la armonía de Guerrero”, y a los magistrados y jueces del Tribunal Superior de Justicia.

“Goberné de tiempo completo”

Astudillo subrayó que “es deber del mandatario responder con oportunidad a los problemas de Guerrero, que, o se atienden de inmediato o se vuelven lumbre que termina por incendiar a todos”.

Afirmó que durante su sexenio siempre trató de respetar a sus paisanos y a sus paisanas con sus palabras y con sus actitudes, y que aspira a que su periodo de gobierno sea un sólido cimiento de la estabilidad política y la paz social de Guerrero.

Recomendó:

“Los guerrerenses no podemos permitirnos empezar cada seis años. Debemos aprender de nuestra historia. Hay que evitar el desbordamiento de las pasiones políticas, que han sido saltos hacia atrás. No podemos los guerrerenses seguir reñidos con el futuro”, consideró.

Aseguró que “entregaré un Guerrero con menos problemas y más oportunidades”, y reiteró que gobernó “de tiempo completo sin rencores, sin soberbia, sin frivolidades, y siempre tratando de hacerlo con prudencia, buscando entendimientos y empatía”.

Asistieron al evento altos mandos del Ejército y la Marina en Guerrero, funcionarios del gobierno estatal encabezados por el secretario de Gobierno, Florencio Salazar, y funcionarios del gobierno federal.