- Miles de niños no están recibiendo una formación escolar adecuada debido a que en los hogares de las familias no hay internet ni televisión, explican
Jesús Saavedra
Maestros de la región de la Montaña aseguraron que la estrategia Aprende en Casa, implementada por la Secretaría de Educación Pública para dar clases a distancia a los alumnos, debido a la pandemia de COVID 19, no está funcionando en esa zona marginada de Guerrero, en donde miles de niños no están recibiendo una formación escolar adecuada debido a la falta de herramientas tecnológicas para un correcto aprendizaje.
El Centro de Derechos Humanos de la Montaña ‘Tlachinollan’ organizó en su programa de radio “La Palabra que Ayuda” un encuentro entre 3 profesores de esa zona que dieron sus apreciaciones sobre el tema educativo y el impacto que tendrá el Covid-19 en miles de niños que no pueden acudir a clases presenciales.
De acuerdo con los maestros, la estrategia de aprendizaje a distancia denominada Aprende en Casa, no está funcionando porque no hay servicio de internet en los 19 municipios de la Montaña, además que la mayoría de las familias no tienen en su hogar un televisor.
No estamos avanzando en el aprendizaje de nuestros alumnos
El primer testimonio lo dio el profesor Praxedis Martínez de la Cruz, quien imparte clases en la primaria multigrado ‘Emiliano Zapata’ de la comunidad de San Miguel Xochimilco, en el municipio de Atlixtac, donde atiende a estudiantes de 1 a 6 grado.
Explicó que en su labor docente antes de la pandemia atendía él solo a los 6 grupos de primaria y era de manera presencial, pero la “pandemia ha traído cambio de 180 grados, ahora hay un compañero que me asiste y aun así hay severos problemas para atender a los niños”.
Dijo que en su caso es “imposible” que Aprende en Casa sea la solución para atender la formación escolar de sus alumnos y que por cuenta propia, con todas las medidas de precaución, tuvo que ir cada quince días a dejar trabajos escolares y estrategias didácticas para el aprendizaje a sus alumnos.
Señaló que debe caminar en promedio 3 horas “para ir a dejar trabajos” a la escuela de esa comunidad, porque “no hay otra opción para que los alumnos puedan trabajar, pero si los alumnos tienen dudas de los trabajos, no podemos despejar sus dudas”.
Además, dijo que “algunos padres no saben leer. Son familias que no tienen acceso a materiales educativos. Es una situación muy triste”, lamentó.
Martínez de la Cruz consideró que “es una mentira que los niños de la escuela puedan avanzar en sus estudios en estas condiciones. Se han hecho videos, pero no hay medios para la estrategia Aprende en Casa. Los padres me dicen que regrese a trabajar porque no podemos avanzar junto con los niños”, dijo.
Consideró que no hay condiciones para que, al menos este ciclo escolar, se pueda regresar a laborar de manera presencial, por lo que debe de trabajar de manera conjunta una estrategia con las autoridades y padres de familia ante esta problemática educativa.
Covid-19 vino a visibilizar severas carencias que tenemos en la Montaña
Por su parte, la profesora Elvira Veleses Morales, jefa de sector 19 de Preescolar de comunidades de Metlatónoc y Cochoapa, afirmó que la emergencia sanitaria “vino a visibilizar las carencias que se tienen en las zonas más pobres como la región en donde vivimos; si cuando había clases presenciales había dificultades para el aprendizaje, con esta pandemia se vinieron a agravar los problemas”.
Expuso que en las comunidades de ese sector educativo “no hay internet, no hay acceso a materiales, son familias que en su mayoría no saben leer y escribir, que necesitan trabajar para poder llevar comida a su casa y no tienen tiempo para ser auxiliares en la formación escolar de sus hijos”.
Veleses Morales dijo que en esa zona escolar decidieron diseñar materiales didácticos a través de guías escolares, cuadernillos, audios “y buscar la forma más efectiva de tener contacto con nuestros alumnos, por ello decidimos viajar cada 15 días a las comunidades a dejar trabajos”.
Señaló que la mayoría de las comunidades de esa zona escolar “no creían en el Covid y decían que los maestros eran flojos y no querían trabajar, pero con todo y esas dificultades hemos hecho el esfuerzo porque los niños tengan algo de formación escolar”.
Explicó que la mayoría de profesores de la zona escolar que atiende no viven en esos municipios, por lo que deben trasladarse para dejar trabajos a sus alumnos, lo que “implica un riesgo” para ellos.
Afirmó que el programa Aprende en Casa “no es algo que opera en la región, trabajamos en coordinación con los padres pero no se garantiza el aprendizaje, estamos haciendo este esfuerzo solo para mantener contacto y evitar la deserción escolar”.
Agregó que otro de los problemas en esa zona es la migración de jornaleros a campos de cultivo de estados del norte del país, porque “son familias que buscan recursos para sostenerse y con la pandemia la necesidad es mayor. A veces solo van 5 niños a recibir trabajos para su formación. Es una gran dificultad la que enfrentamos en esta pandemia”, añadió.
No hay avances significativos en la formación escolar
La maestra Gloria Hilda Rivera Cabrera, quien labora en la Unidad de Apoyo al Servicio Educación Regular (Uaser), en el municipio de Olinalá, dijo que su labor es apoyar a los docentes de aula regular en preescolar y primaria, y admitió que la pandemia ha provocado atraso en su formación.
Indicó que los estudiantes de preescolar “tienen un avance mínimo por la facilidad de enseñarles a través de dinámicas escolares interactivas, pero con los alumnos de primaria hay dificultad en su formación porque no tienen una asistencia en casa de los padres por circunstancias de su condición económica o académica”.
Señaló que en la zona donde labora “hay migración, padres que no saben leer y escribir, son familias pobres, sin acceso a internet, en su mayoría de las 5 escuelas que nos corresponde atender”.
Confirmó que la estrategia Aprende en Casa no ha funcionado en la Montaña por las condiciones de pobreza y marginación de la población.
Añadió que por su cuenta han pedido a los hermanos de sus alumnos que ya van en un grado escolar mayor, que “nos auxilie, auxilie a sus papás y a sus hermanos, pero no hay un avance significativo, necesitamos de estrategias efectivas para poder salvar esta formación escolar en la Montaña”.
Los tres profesores coincidieron que no creen que, al menos en esa región, haya condiciones para el regreso presencial a clases en lo que resta del ciclo escolar que concluye en junio, y advirtieron que si las autoridades educativas así lo determinan, deberán de darles condiciones de seguridad para ellos y sus alumnos.