- El responsable de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa reveló que en estos momentos hay otros 3 presbíteros contagiados con coronavirus, entre ellos el padre Baltazar Vega
- Además reprochó que hoy se cumplen 3 años de los homicidios de los sacerdotes Iván Añorve y Germaín Muñoz, ocurridos en Taxco, y continúan en la impunidad
Alondra García
El obispo Salvador Rangel Mendoza informó que cinco sacerdotes de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa han fallecido a causa del COVID-19, entre ellos el párroco de Nuestra Señora de Guadalupe, ubicada en Tierra Colorada, Ociel Bello Cuevas, y quien fuera el encargado de la parroquia de San Judas Tadeo, Ignacio Morales Pablo.
También se registraron fallecimientos en el municipio de Taxco de Alarcón y por lo menos otro sacerdote muerto en Chilpancingo, además que actualmente hay otros tres sacerdotes infectados, entre ellos Baltazar Vega, mejor conocido en Chilpancingo como el padre Balta, pero no precisó cuál es su estado de salud.
El obispo también reveló que varias religiosas de la Orden de la Inmaculada Concepción, de Taxco, se encuentran infectadas por el nuevo coronavirus.
Comentó que los padres de la madre superiora murieron recientemente a causa de la pandemia.
“Desgraciadamente ahorita tenemos casi 160 mil muertos en México a consecuencia del Covid, hacemos una invitación a toda la población a tomar muy en serio las medidas sanitarias (…), muchos de nosotros hemos tenido conocidos o familiares que han muerto, por eso la invitación es a que hagamos un esfuerzo serio porque la pandemia del Covid está arreciando”, expuso.
De parte de la Iglesia Católica, explicó que existe un esfuerzo para frenar los contagios entre sus feligreses.
Por ello se modificaron algunas y se suspendieron casi todas las actividades públicas de la Semana Santa.
El 17 de febrero, cuando se celebrará el miércoles de ceniza, solamente colocarán polvo de ceniza sobre la cabeza sin tocar a los feligreses.
También se suspendieron la procesión del domingo de ramos, las tradicionales fiestas de Taxco y el lavatorio de pies del jueves santo.
En el caso de las misas, se realizarán con un aforo máximo del 30 por ciento y se mantendrán las transmisiones en redes sociales para que los creyentes puedan seguirlas desde sus casas.
Rangel Mendoza lamentó que a pesar de que estamos en semáforo rojo, “los mercados están llenos de gente”.
También reprochó que “como estamos en periodo electoral, los señores políticos hacen reuniones masivas, multitudinarias (…), poniendo en peligro de contagio a la población”.
Por ello, les pidió que “le bajen”, porque las normas sanitarias aplican para todos.
No hay justicia por sacerdotes asesinados
Este viernes se cumplen tres años del asesinato de los sacerdotes Iván Añorve Jaimes y Germaín Muñoz García, quienes fueron atacados a balazos en la carretera Taxco-Iguala.
El obispo Salvador Rangel Mendoza lamentó que el crimen permanece en la impunidad.
“Van tres años y la Fiscalía General del Estado oficialmente no nos ha dado ninguna explicación”, reprochó el prelado.
Por ello, hizo un llamado al fiscal Jorge Zuriel de los Santos Barrila a agilizar las investigaciones.
“No es justo que en Guerrero haya tantos crímenes que se quedan así, impunes, y luego de sacerdotes que somos servidores públicos y estamos al servicio de la comunidad, no es justo que los asesinen así, nomás por nomás”, expresó.
El obispo recordó que el anterior fiscal, Javier Olea Peláez, difundió versiones sobre los sacerdotes para desprestigiarlos y justificar su asesinato.
“Los habían acusado pero inmediatamente yo protesté, fue una mentira total en ese tiempo del fiscal Olea, pero hasta ahorita no nos han dado ninguna explicación coherente”, apuntó.