• “Desgraciadamente el número de contagios y defunciones” por COVID-19 se está incrementando, alertó el alcalde capitalino al poner en marcha campaña de sanitización

Redacción

El alcalde de Chilpancingo, Antonio Gaspar Beltrán, advirtió que el municipio podría pasar a semáforo rojo la próxima semana, o a más tardar en 15 días, debido al reciente aumento de personas infectadas y muertas por COVID-19.

Este lunes, el alcalde arrancó la campaña emergente de sanitización urbana como parte de la estrategia para combatir la pandemia de coronavirus y durante el evento reconoció que, “en lugar de reducir los contagios, este año comenzó con un repunte muy importante”.

Por ello, Gaspar Beltrán admitió que existe una “posibilidad latente” de que Chilpancingo regrese a rojo en el semáforo epidemiológico, “si no es que la próxima semana, en 15 días”.

Detalló que la capital cerró el año pasado con 270 defunciones acumuladas por COVID-19, pero en lo que va de enero el registro subió a 307 muertos, lo que representa un incremento del 10 por ciento en menos de un mes.

“Desgraciadamente el número de contagios y defunciones se está incrementando (…), eso es algo que nos alerta a no estar de brazos cruzados ni tampoco sentados”, señaló.

En su discurso, Gaspar Beltrán dio instrucciones al secretario de Seguridad Pública Municipal para que se retome la campaña de perifoneo y “alertar a la población de la crisis que se avecina”.

También hizo un llamado a los comerciantes ambulantes y semifijos de las calles aledañas al mercado Baltazar R. Leyva Mancilla, como Roberto Nájera y Abasolo, para que acaten las medidas preventivas y eviten aglomeraciones.

Advirtió que de ser necesario, tomará la determinación de cerrar esas vialidades con el apoyo del gobierno del estado, el Ejército y la Guardia Nacional.

“El antídoto más importante que hay” contra la pandemia “es la prevención, esto es un contagio social, las aglomeraciones son las que generan esta pandemia”, apuntó el alcalde.

Asimismo, anunció que la Dirección de Gobernación municipal reforzará las inspecciones a los comercios y establecimientos, para vigilar que se respeten las medidas sanitarias.

También hizo un llamado a los trabajadores del Ayuntamiento para que participen como voluntarios en la brigada de sanitización, porque el municipio tiene una plantilla de más de tres mil empleados, de los cuales el 80 por ciento permanece en aislamiento.

“Estamos esperando 300 voluntarios de los trabajadores municipales, no podemos obligarlos, no podemos sacarlos del aislamiento en el que están, (pero pedimos) que se solidaricen con Chilpancingo”, expresó Gaspar.

Cuestionado sobre si se aplicarán medidas restrictivas para detener el avance de la pandemia en la capital, Gaspar Beltrán descartó que vaya a solicitar el cambio del semáforo epidemiológico a color rojo, como hicieron los presidentes municipales de Iguala y Taxco.

“Yo creo que no podemos actuar a voluntades caprichosas”, sentenció.

En cambio, dijo que esperará a que la Copriseg y la Cofepris determinen si debe cambiar o no el semáforo epidemiológico de Chilpancingo.

Como gobernante, dijo que está “dispuesto y atento para acatar las disposiciones de las autoridades sanitarias”, pero reconoció que el cambio de semáforo a color rojo afectaría a un gran porcentaje de la población que “vive al día” y que “sale a trabajar por necesidad”.

Por ello, consideró que antes de decretar el cierre total de las actividades no esenciales, se debe de pensar en una estrategia que ayude a subsistir a las familias más vulnerables.

Particularmente señaló el banco de alimentos que su gobierno implementó el año pasado durante el semáforo rojo.

Reconoció que su gobierno y la ciudadanía enfrentan “una situación precaria” y por ello es necesario hacer todo lo posible para no regresar a rojo en el semáforo epidemiológico.