- * “Tenemos un gran problema de liderazgo y vacío institucional en toda la República y eso lleva a que exista una posibilidad muy cierta de que, en 2021, no nos va a ir bien”, advirtió el exconsejero de ese partido
Redacción
El exconsejero estatal de Morena, Sergio Montes Carrillo, advirtió que al partido se perfila hacia “una derrota anunciada” en las elecciones de 2021, debido a los conflictos internos y la falta de una dirigencia legítima.
Quien fuera representante de Morena ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC), concedió una entrevista al periodista Federico Sariñana Valdez en redes sociales.
Durante la conversación, subrayó que las actuales cúpulas de Morena se negaron a cumplir con una sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que ordena la renovación de la dirigencia nacional mediante una encuesta abierta.
Aseveró que actualmente el partido que fundó Andrés Manuel López Obrador carece de legitimidad, e incluso afirmó que “la Cuarta Transformación va en un carril y Morena como partido va en otro”.
Montes Carrillo reconoció que en 2018, Morena alcanzó una votación histórica que llevó a Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República y colocó a un número importante de senadores, diputados federales, locales y alcaldes gracias al “efecto AMLO”.
Sin embargo, advirtió que para la elección de 2021 el escenario no se vislumbra tan favorecedor, porque López Obrador ya no estará en la boleta.
Además, el escenario se complica porque Morena, tanto a nivel nacional como local, está metido en “un laberinto de problemas”.
Montes Carrillo reconoció que esta situación es aprovechada por la oposición, que ya está organizada y trabajando para reposicionarse.
“Tenemos un gran problema de liderazgo y vacío institucional en toda la República y eso lleva a que exista una posibilidad muy cierta de que, en 2021, no nos va a ir bien”, advirtió.
Explicó que los conflictos internos de Morena “disminuyen sus expectativas de triunfo”.
Auguró que “lo que más le va a pegar es el socavón jurídico” por la falta de una dirigencia legitimada, que a su vez ha provocado una falta de organización del partido para enfrentar el proceso electoral.
Montes Carrillo señaló que la de 2021 será “una elección nacional muy grande”, porque habrá comicios en 15 entidades federativas, con igual número de gubernaturas en juego y cambios en algunos congresos locales y alcaldías.
Por ello, advirtió que Morena se encamina hacia una “derrota anunciada” si no acata la sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación de renovar la dirigencia por medio de encuesta abierta.
“Esto es jurídico pero también político, porque el partido se va a encontrar en una falta de legitimación”, expuso.
De acuerdo con Montes Carrillo, la falta de legitimidad dentro de la dirigencia de Morena provocará que las candidaturas sean impugnadas ante los tribunales.
La judicialización para resolver las candidaturas podría extenderse hasta tal punto, que no habría tiempo para hacer campaña y los pondría en riesgo de perder las elecciones.
El exrepresentante de Morena ante el IEPC recordó que en los comicios de 2018 “hubo cuatro elecciones municipales y dos diputaciones” que se resolvieron 15 días antes de la votación.
“No hicieron campaña, fueron derrotados, los mandaron al tercer o cuarto lugar y ahora está la posibilidad de que ocurra lo mismo, pero de una manera mayúscula”, alertó.
Por lo pronto, dijo que “el diálogo dentro del partido está roto”, tanto a nivel nacional como local.
No se ganará sin alianzas
Montes Carrillo también fijó su postura respecto a la posibilidad construir alianzas entre Morena y otros partidos políticos rumbo a las elecciones de 2021.
“Creo que debe quedarnos muy claro que ningún partido va a ganar sólo”, aseveró.
Prueba de ello, dijo, es fueron las elecciones de 2019 para la gubernatura del estado de Puebla.
Recordó que el candidato de Morena, Miguel Barbosa, ganó con una ventaja muy pequeña, la cual fue posible gracias a la alianza con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
Por ello, sostuvo que la política actual de Morena de considerar las alianzas como “nocivas” es un error.
“Ningún partido va a ganar si no hace alianzas, eso está muy claro”, insistió.
Respecto a las candidaturas para gobernador y diputados federales, explicó que estas tendrán que resolverse en la dirigencia nacional.
Sin embargo, señaló que “a muchos compañeros no les cae el veinte de que las candidaturas no se van a resolver por cuestiones de gusto o interés local, porque son asuntos muy importantes que se van a resolver en el ámbito nacional”.
Montes Carrillo señaló que actualmente Morena tiene “muchísimos, un sinfín de aspirantes que piensan que si llegan a ser candidatos ya automáticamente serán gobernadores”.
Subrayó que esa creencia es falsa, porque “el PRI y el PRD son fuertes en Guerrero”.
Por ello, dijo que es necesario que Morena haga “mucho trabajo político en tierra”, construya sus estructuras para la defensa y promoción del voto y las estructuras de representantes para vigilar los conteos en las urnas.
Alertó que “si no se tiene una estructura porque hay un pleito interno y no se ponen de acuerdo”, los resultados para Morena en las elecciones podrían no ser positivos.
Montes Carrillo también desestimó a las encuestas que posicionan a Morena con una ventaja de hasta el 42 por ciento para la elección de gobernador.
“Las encuestas son fotografías del momento, pueden ir cambiando, las encuestas muchas veces son de quien las paga, los resultados (de una elección) tienen que ver con muchos aspectos jurídicos, políticos y de estructura para obtener el triunfo, no es tan fácil como muchos piensan y menos ahora que el fenómeno AMLO no estará en la boleta”, expuso.
El militante de Morena lamentó que el partido está “repitiendo demasiados vicios del PRD a una velocidad muy rápida y si la idea fuera destruir al partido lo están haciendo a buen ritmo y lo están haciendo bien”.
Advirtió que el desacato al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación “puede llevar a sanciones al partido que nunca se han aplicado a otros partidos políticos”.
“Están llevando esto al límite”, reprochó.