Bernardo Torres

Integrantes del Concejo Indígena Popular de Guerrero “Emiliano Zapata”, denunciaron un nuevo ataque armado contra la comunidad de Tula, Municipio de Chilapa, a manos del grupo delictivo “Los Ardillos”, sin que hubiese personas lesionadas.

A través de un comunicado, reprocharon que de nada sirvieron las promesas del gobierno de AMLO a través de su representante Alejandro Encinas, “el fuego nuevamente cimbro las tierras de Chilapa en manos del grupo narco-paramilitar Los Ardillos, que tantas veces hemos denunciado y seguiremos denunciando”.

Este nuevo ataque, señalaron, se da a un año y dos meses del asesinato de los concejales, delegados, promotores y promotoras del CIPOG-EZ, CNI y CIG: José Lucio Bartolo Faustino, Modesto Verales Sebastián, Bartolo Hilario Morales, Isaías Xanteco Ahuejote, David Domingo Alonso, Marcelino Pedro Rojas, Juana Hernández Ambrosio y Alberta Matías Tendón.

Detallaron que este sábado alrededor de las 4:30 de la tarde, más de 100 hombres armados abrieron fuego con armas de grueso calibre en contra de la comunidad de Tula Guerrero, que se extendió por espacio de tres horas.

El resultado del ataque, fue de varias casas y corrales destruidos, sin que hubiese personas heridas, pues los habitantes abandonaron en ese momento sus hogares y se refugiaron en el monte para salvar sus vidas.

“Afortunadamente no se perdió ninguna vida, gracias a que nuestros compañeros promotores y la comunidad, se mantienen en resistencia y repelieron el ataque lo que permitió a la población huir y los narco-paramilitares ya no se internaron a la comunidad”, señala el escrito.

Estos hechos ocurrieron a escasos dos kilómetros de la base permanente de la Guardia Nacional, quienes escucharon las más de tres horas de balacera, sin hacer absolutamente nada.

Dicha base fue puesta como parte de las medidas de seguridad a las que se comprometió el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, pero se limitan a labores de vigilancia y revisión de vehículos.

Hicieron un llamado al Gobierno Federal a actuar de manera contundente en contra de este grupo armado, del cual ya cuentan con los antecedentes necesarios, elementos jurídicos y decenas de denuncias de la población, a fin de evitar que sigan hostigando a las comunidades.

“Por eso exigimos que inmediatamente se garantice el derecho a la vida de nuestros pueblos, promotores e integrantes del CIPOG-EZ, exigimos el inmediato desmantelamiento del cuartel del grupo narco-paramilitar “Los Ardillos”, que opera frente a la comunidad de Tula Guerrero desde hace ya un año”, concluye. API