• * Restos encontrados a 800 metros del basurero de Cocula corresponden a Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, de acuerdo con la Universidad de Innsbruck, Austria
  • * Sería el tercero de los 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa que son identificados positivamente a partir de restos óseos hallados en ese municipio de la zona Norte

Jesús Saavedra

La Fiscalía General de la República (FGR) informó que la Universidad de Innsbruck, en Austria, confirmó que un fragmento de restos óseos que fue localizado en una barranca, a 800 metros del basurero de Cocula, corresponden a Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, uno de los 43 estudiantes desaparecidos de manera forzada en Iguala.

En conferencia de prensa, el titular de la Unidad Especial en Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa de la FGR, Omar Gómez Trejo, explicó que antes de dar detalles públicos de esta información les dieron a conocer la noticia de manera privada a los padres del muchacho desaparecido.

El funcionario federal dijo que el objetivo de esta unidad es “sanear y replantear la investigación, buscaríamos nuevas evidencias que nos condujera al esclarecimiento de las irregularidades en la investigación que durante años se fueron replicando y de igual manera con la misma importancia buscaríamos esclarecer los hechos ocurridos durante la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre del 2014 y dar con el paradero de los estudiantes desaparecidos”.

Gómez Trejo indicó que pidieron a la sociedad información para el esclarecimiento del caso, “garantizando la seguridad de los informantes e incluso proponiendo incentivos dentro del marco de la ley; empezamos a recibir información del paradero de los estudiantes, hemos escuchado a cada una de las fuentes que son verídicas y acudido a cada uno de los lugares siempre acompañados de la Comisión Presidencial del Caso Ayotzinapa que encabeza el subsecretario (de Gobernación), Alejandro Encinas Rodríguez, y de los representantes legales de las familias”.

Explicó que se han realizado más de 20 acciones de búsqueda en Guerrero y que una de ellas se realizó del 21 al 29 de noviembre del año pasado en un punto de Cocula conocido como Barranca de la Carnicería en municipio de la zona Norte.

Enfático, el funcionario sostuvo que “ese lugar no es el basurero de Cocula, ya que la barranca se encuentra a más de 800 metros de distancia donde se crea la narrativa de la verdad histórica; en el pasado dentro del mismo expediente se refirió información de esta zona sin que se agotara lo que deberá establecer una serie de deslindes para las responsabilidades a las que haya lugar”.

Explicó que durante la diligencia de noviembre del año pasado se recuperaron 15 indicios, los cuales fueron embalados para su procesamiento y en presencia de los representantes de las familias y la Comisión Presidencial.

Agregó que el pasado 26 de febrero, esa evidencia fue analizada en la Ciudad de México en Servicios Periciales de la FGR, lo que atestiguaron abogados de los padres de los muchachos y del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF). “Se realizaron las diligencias para determinar su los indicios recabados eran propensos para realizar los análisis genéticos correspondientes, producto de ese escrutinio se eligieron 6 piezas, que pudiesen ser susceptibles para la extracción de ADN”, dijo.

Informó que esas 6 piezas fueron enviadas a finales de febrero en valija diplomática al Instituto de Genética de la Universidad de Innsbruck, Austria, que comunicó los resultados de sus exámenes el pasado 19 de junio a la FGR y al EAAF, y “una de ellas corresponde al estudiante Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, uno de los jóvenes normalistas desaparecidos” el 26 de septiembre de 2014.

Dijo que para mayor certeza, esos resultados fueron analizados por el EAAF, “que terminó su revisión el 4 de julio, concluyendo de forma coincidente que una de las piezas óseas enviadas al laboratorio de Innsbruck pertenece al estudiante normalista, Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, de forma indubitable correspondiente a una extremidad inferior”.

Gómez Trejo añadió que el pasado domingo 5 de julio él viajó de la Ciudad de México a Tixtla para informar de manera directa a la familia del estudiante los resultados de esos análisis y de cómo hallaron esos restos, para “solventar todas y cada una de sus preguntas y dudas que tuvieran al respecto”.

Añadió que este martes por la mañana sesionó la Comisión Presidencial para la Verdad y la Justicia en el caso Ayotzinapa y acudió una representación de los padres de los 43 estudiantes, a la que proporcionó esa información; “hemos sido sumamente cuidadosos en la forma de informar y atemperar al máximo los efectos de la revictimización al momento de dar este tipo de noticias”, dijo.

Sostuvo que la familia del estudiante “se enteró de una forma digna por los funcionarios a cargo de esta investigación y no por los medios, aún en el contexto de ser una noticia dolorosa; a la familia le mando un fuerte abrazo y toda mi solidaridad a sus padres, hermanos y familiares que les rodean, así como a las familias de los 43 estudiantes desaparecidos y a los compañeros de Christian de la normal rural de Ayotzinapa”.

Aseguró que esos resultados son un “avance en la investigación a más de 5 años de los hechos, ha sido identificado un resto humano perteneciente a una de las víctimas, éste además no fue tirado, ni encontrado en el basurero de Cocula, ni en el río San Juan, tal y como la versión que pública y judicialmente sostuvo la anterior administración”.

Afirmó que con ese nuevo hallazgo, “la verdad histórica se acabó y enfatizo: el caso sigue abierto, el compromiso de garantía de justicia y verdad en el caso serán cumplidos; es importante destacar que las líneas de investigación de cómo el fragmento óseo hoy identificado fue llevado a este lugar del hallazgo, aún tiene que consolidarse”.

Indicó que trabajan en “pruebas objetivas que soporten estas líneas y así a diferencia de lo que ocurrió en el pasado no precipitará resultados, ni adelantará conclusiones que no cuenten con dicho sustento; haremos otro envío de otros restos hallados a Innsbruck y seleccionados de forma consensuada entre los peritos de la FGR y los especialistas del EAAF”.

Hizo un llamado a la sociedad para que coopere con información del caso, “el hallazgo que hoy damos a conocer, da cuenta que estamos actuando con toda la seriedad, hemos roto el pacto de impunidad y de silencio que rodeaba el caso de Ayotzinapa”.

Finalizó diciendo que las familias y la sociedad tienen derecho a la verdad, por lo que “la búsqueda de sus hijos seguirá y garantizaremos el acceso a la justicia”.

La “verdad histórica” que presentó la Procuraduría General de la República unos meses después de los hechos ocurridos en Iguala indica que un numeroso grupo de jóvenes había sido llevado por sicarios de Guerreros Unidos al basurero de Cocula, donde los habían asesinado e incinerado, y después sus restos los habían tirado en el cauce del río San Juan.

 

Otros dos normalistas ya fueron identificados

Además de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, otros dos normalistas de los 43 desaparecidos ya fueron identificados a partir de restos óseos que fueron encontrados en el Ríos San Juan, por los investigadores de la Procuraduría General de la República.

Se trata de Alexander Mora Venancio y Joshivani Guerrero de la Cruz, cuyos restos también fueron analizados en la Universidad de Innsbruck, pero solo uno de esos casos cuenta con el respaldo del EAAF.

El 7 de diciembre de 2014, la Procuraduría General de la República (PGR) informó que algunos restos hallados en el basurero de Cocula correspondían al joven Alexander Mora Venancio.

En su momento, Vidulfo Rosales, abogado de los familiares a través del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, reconoció los resultados de la PGR sobre muestras enviadas a Universidad de Innsbruck, en Austria, institución que analizó fragmentos óseos y confirmó, por estudios genéticos, que una parte de hueso y una muela correspondían al joven que estudiaba el primer año para licenciarse como maestro de escuela primaria.

Sin embargo, ni el defensor legal ni Ezequiel Mora Chora, padre del normalista, creyeron en la hipótesis de las autoridades, porque esa información formaba parte de la verdad histórica de la PGR.

Una segunda identificación se registró un año después, cuando el 16 de septiembre de 2015, casi un año más tarde de los eventos en Iguala, Arely Gómez, entonces titular de la PGR, informó que se había logrado la identidad de Joshivani Guerrero de la Cruz, pero este proceso no tuvo respaldo del EAAF.