Jesús Saavedra

La emergencia sanitaria que se vive en el país por el coronavirus Covid-19, que ha obligado a que las autoridades sanitarias emitan una cuarentena obligatoria, ha ocasionado el incremento de denuncias de violencia intrafamiliar.

Esto obliga a las autoridades a atender con apremio esta situación en Guerrero particularmente donde han sido asesinadas once mujeres en las últimas semanas.

Así lo sostuvo la legisladora local perredista, Dimna Salgado Apatiga, quien hizo un llamado al Ejecutivo del estado y alcaldes de Guerrero, a dar seguimiento y destinar los recursos y personal que sean necesarios para atender el incremento de actos de violencia contra las mujeres.

Salgado Apátiga alertó que colectivos de mujeres le han hecho llegar información en el sentido que, desde que se decretaron medidas de confinamiento domiciliario para evitar la expansión de Covid-19, once mujeres han sido asesinadas en Guerrero.

Explicó que según la información que le compartieron nueve de esos casos corresponden a “feminicidios en los últimos once días, los cuales se registraron en Florencio Villareal, Cuajinicuilapa, Azoyú, Taxco, Benito Juárez (San Jerónimo) y Acapulco, siendo éste último el municipio con mayor número de casos, con un total de cuatro”, aseveró.

Recordó que entre el jueves y el viernes de la semana pasada, desaparecieron tres mujeres en Guerrero, “quienes fueron vistas por última vez en Malinaltepec, Ometepec y Acapulco” y señaló que por esos casos ya se activaron el Protocolo Alba y la Alerta Ámber a través de la Fiscalía General del Estado (FGE).

Dimna Salgado indicó que el pasado 9 de abril la Secretaría de Gobernación dio a conocer que en el país se han atendido más casos de violencia contra las mujeres durante el confinamiento, “la dependencia federal informó que al número de emergencias 911 se ha reportado un aumento de violencia contra las mujeres entre 30 y un 100 por ciento, de acuerdo a informes de las entidades federativas”.

La legisladora del PRD consideró que los ajustes presupuestales que se hacen en el gobierno del estado y Ayuntamientos municipales para atender el problema de salud de la pandemia de Covid-19 y sus efectos económicos, “no deben ser motivo de recortes a las áreas que atienden el entorno familiar”.

Recordó que “de por sí hay un rezago en el cumplimiento de las alertas de género en los municipios que han sido decretadas, y el encierro que viven las familias ha detonado un aumento de hechos de violencia que no pueden ser desatendidos”.

Por tal motivo hizo un llamado a los alcaldes de Guerrero y a las dependencias del gobierno estatal “a poner toda su atención y recursos para evitar que escalen o aumenten las agresiones contra las mujeres en esta etapa de la emergencia sanitaria”.