• * Se trata de los tramos Chilpancingo-Chilapa, Tlapa-Puebla, Iguala-Coyuca de Catalán, Coyuca de Catalán-Zihuatanejo, Iguala-Chilpancingo-Colorada y Xochipala-Atoyac, según Inventing For Life

Seis tramos de la red de carreteras de Guerrero se encuentran entre los más peligrosos del país y registran los índices más altos de robo a transportistas.

De acuerdo con el Mapa Delictivo Nacional realizado por MSD Inventing For Life, 31 transportistas son víctimas de robo a nivel nacional cada 24 horas. Entre los estados con mayor índice delictivo en sus carreteras se destaca Guerrero.

Particularmente se señalaron los tramos Chilpancingo-Chilapa, Tlapa-Puebla, Iguala-Coyuca de Catalán, Coyuca de Catalán-Zihuatanejo, Iguala-Chilpancingo-Colorada y Xochipala-Atoyac

En la carretera que va de Coyuca de Catalán a Zihuatanejo se han registrado recientemente episodios de violencia.

El 20 de diciembre del año pasado desaparecieron dos jóvenes turistas que salieron de la Ciudad de México con dirección a Zihuatanejo. Su auto fue localizado abandonado y con huellas de violencia; ellos aparecieron con vida días después.

En 2016, un grupo armado asesinó a una pareja de recién casados originaria de la Ciudad de México, que se dirigía a Ixtapa a celebrar su luna de miel.

El matrimonio sufrió una emboscada porque los confundieron con integrantes de un grupo criminal antagónico.

En tanto que Chilapa enfrenta una crisis de violencia, por lo que existe la propuesta de declararla zona de crisis humanitaria.

El dirigente del Colectivo Siempre Vivos, José Díaz Navarro, se ha referido a la carretera Chilpancingo-Chilapa en varias ocasiones como “la ruta de la muerte”.

La carretera Xochipala-Atoyac atraviesa una zona de la sierra en la que se encuentra activa una disputa entre grupos delictivos.

Mientras que en la carretera Chilpancingo-Colorada hay un despliegue importante de civiles armados que se asumen como policías comunitarias.

Precisamente en esa carretera, a la altura de Petaquillas, hace un par de años la policía comunitaria que tenía instalado un retén disparó contra un grupo de jóvenes de la Ciudad de México que se dirigían a vacacionar al puerto de Acapulco.

Una mujer recibió un tiro en la columna vertebral y quedó en silla de ruedas, sin que hasta el momento las autoridades hayan detenido a los culpables.