SADYHEL ASTUDILLO
Aprovecho el espacio para felicitar a mi novia Rocio Morales quien cumplió años el día de ayer. Gracias Chío por tu compañía, comprensión y cariño. Te amo.
Esta semana que concluye, nuestro Presidente Andrés Manuel López Obrador en compañía de Paco Ignacio Taibo quien está al frente del Fondo de Cultura Económica (FCE), dieron a conocer una serie de acciones enmarcadas en el programa institucional de fomento a la lectura, comenzando por aplicar nuevas estrategias para incrementar el número de lectores activos en el país y para que los que ya son lectores asiduos incrementen la cantidad de libros que consumen anualmente. Dentro de las principales acciones que mencionaron fue que tendrían a la venta libros desde diez pesos, caravanas y ciclos de lectura, etc.
Si bien es sabido por todos, que la mayoría de los mexicanos no leen y la gran mayoría (principalmente jóvenes) prefiere hacerlo de forma digital, en el mejor de los casos compran la versión digital del libro que les interesa, en el peor, pues lo descargan ilegalmente. Eso genera que las librerías e imprentas no sean un negocio del todo rentable en el país, por consiguiente el FCE no tiene una entrada fuerte de capital continuamente y –desde mi perspectiva- el mal baratar sus títulos no será de gran ayuda, entonces ¿Cómo incentivar la lectura y posterior venta de libros?
La primera pista la tenemos al principio del párrafo anterior, mucha gente prefiere leer en sus celulares o tabletas, entonces que se recurra a comercializar versiones digitales de libros a un precio más económico que la versión impresa, de esa manera se ahorra el consumo de tinta y papel y el dinero del consumidor. De igual forma se podrían subir las primeras páginas de varios libros para lectura digital y de esta forma enganchar al lector para que adquiera el título que le interesó.
Las redes sociales y el internet facilitarían bastante la distribución y promoción de dichas versiones digitales pero ¿Qué sucede si un cliente lo compra y distribuye esa versión digital con sus amigos? Actualmente existen miles de “candados” y archivos protegidos en contra de la piratería, si bien se pueden aplicar alguno de ellos a las versiones digitales, además ¿Apoco quien compra un libro en físico nunca se lo ha prestado a dos o más conocidos? De hecho es más difícil evitar el préstamo del físico que el compartir el digital.
Mientras que, con los libros ya impresos, podrían hacerse promociones de 3×2 o algo similar, las cuales sean de un solo género, de un solo autor o incluso “paquetes sorpresa” donde los títulos que te tocan sean al azar, en lugar de simplemente darlos a un precio realmente bajo, lo cual podrían generar una saturación del mercado y una reventa desmedida. Por otro lado, las caravanas de lectura, en lugar de llevar mil y un títulos para lectura gratis en los cuales los que se acercan no sabrían ni cual tomar (como pasa con el enorme catálogo de Netflix), deberían de promocionar ciertos títulos por semana o por día, lunes de ciencia ficción, martes de historia, miércoles de terror, etc., de esta forma quienes se acerquen a dichos locales ya van con la atención fija en un género en particular e incluso ya sabrían que día ir y las personas que atiendan dichas librerías ambulantes pueden hacer una recomendación específica y no perderse entre el sinnúmero de obras que existen.
Estas son por mencionar algunas de las estrategias que se podrían aplicar, de hecho el tema da para más y se continuará la próxima semana. Por último y como el título de esta semana lo indica, se va a hablar de dos novedades y aún falta una.
En otro orden de ideas amables lectores, comento que a finales del año pasado se estrenó una película animada de Spider-Man, la cual seas fan del personaje o no, deberías ver. Dicho filme ha sido bien recibido y ha sido nominado y premiado en distintos festivales y ahora con la entrega de los Oscar en los próximos días, no puede ser la excepción, también tiene nominaciones. Lo comento ya que deberíamos estar orgullosos de que, son más de veinte mexicanos los que participan en el equipo que está detrás de la película y uno de ellos es guerrerense, Cruz Antonio Contreras Mastache, quien participó en la parte de animación, cabe mencionar que en los Oscar la película está nominada por su animación. Así que tenemos muchas razones para estar orgullosos del talento mexicano que en esta ocasión no simplemente nos estará representando con la película de Roma. Esperemos que los años venideros sigan siendo de crecimiento cultural para México y los mexicanos.