* Unos mil maestros disidentes se manifestaron en el marco de los 50 meses de la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa, además de exigir una mesa de diálogo con las autoridades estatales

Jesús Saavedra

Alrededor de mil maestros afiliados a la Coordinadora Estatal de los Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) y miembros de la Dirección Colectiva de Organizaciones Sociales en Guerrero, marcharon en la Autopista del Sol y bloquearon durante más de tres horas esa vía a la altura del Parador del Marqués, lo que provocó que cientos de automovilistas quedaran varados en ambos sentidos.
Los inconformes realizaron esta acción, al cumplirse 50 meses de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa y para exigir que se cumpla la abrogación de la Reforma Educativa, encabezados por el dirigente de la CETEG, Arcángel Ramírez Perulero, y el dirigente de la Asamblea Popular de los Pueblos de Guerrero (APPG), Nicolás Chávez Adame.
Se sumaron miembros del Sindicato Único de Trabajadores del Colegio de Bachilleres (Sutcobach) y maestros jubilados, quienes reprocharon al gobierno federal que cuatro años después de la desaparición de los estudiantes, ocurrida en Iguala, aún no haya castigo a los responsables.
También solicitaron una mesa de trabajo con el gobernador Héctor Astudillo Flores para que el gobierno estatal de solución a sus demandas.
La marcha inició en las oficinas de la CETEG, ubicadas en la colonia Burócratas, y avanzó por la avenida Rufo Figueroa hasta llegar al entronque con el bulevar Vicente Guerrero, donde dieron vuelta rumbo al sur, hasta llegar al sitio conocido como Parador del Marqués, donde a las 13:20 horas bloquearon los cuatro carriles de esa vía como medida de presión para lograr esta audiencia con el mandatario estatal.
El dirigente de la CETEG, Arcángel Ramírez Perulero, informó que este mismo día se realizó un “juicio político popular” en contra del gobierno saliente de Enrique Peña Nieto, en la Ciudad de México, “y la marcha aquí en Guerrero es una réplica de esta acción”.
Destacó que además exigen la instalación de una mesa de trabajo con autoridades estatales para discutir la Reforma Educativa —que aplica el gobierno federal— y otras acciones que han puesto en riesgo la estabilidad laboral de los maestros.
Entrevistado durante la marcha, Ramírez Perulero dijo que en algunas distintas regiones de Guerrero se han presentado casos de intimidación y hostigamiento contra maestros, por parte de presuntos miembros del crimen organizado que les exigen el pago de cuotas ante los pagos que recibirán en diciembre.
Dijo que este tipo de casos han ocurrido en Acapulco, en la Montaña baja y el reciente ocurrió el “levantón” del director de la escuela primaria Lázaro Cárdenas del Río, en Chilpancingo, quien afortunadamente fue liberado sin sufrir alguno tipo de daño.
También habló de la inseguridad que enfrentan los maestros que laboran en pueblos de la Sierra, en donde no existen las condiciones para que las clases se regularicen.
Además, el dirigente cetegista aseguró que en la entidad se requieren una “infinidad” de docentes en todas las regiones, donde se encuentran sin cubrir los espacios que dejan maestros que se jubilan.
Dijo que la CETEG exige la nivelación salarial para los trabajadores que cobran un sueldo con una clave “baja” de unos 3 mil pesos a la quincena y la integración al Fondo para la Nómina Educativa y Gastos de Operación (Fone) más de cinco mil docentes y administrativos cuyas plazas no han sido reconocidas por la Secretaría de Educación Pública.
Los jubilados, por su parte, exigen el pago del PPS, la recuperación de las cuotas del SAR Fovissste, restitución de 50 días de aguinaldo para los jubilados y pensionados, el incremento de gastos funerarios, la construcción de un hospital de tercer nivel en Chilpancingo, la atención digna y expedita a los jubilados en el ISSSTE, así como dotación de medicamento y la construcción de casas de convivio para los jubilados en las ciudades principales de Guerrero.
Después de casi tres horas de bloqueo, que generó el enojo de cientos de automovilistas que se quedaron atrapados en el embotellamiento, la protesta concluyó alrededor de las 16:30 horas sin que los convocantes lograran establecer diálogo con las autoridades como lo pedían, pero sí quemaron monigotes con las figuras del presidente Enrique Peña Nieto y del ex gobernador Ángel Aguirre Rivero.
Posteriormente marcharon hasta el monumento a Las Banderas, en la avenida Lázaro Cárdenas, donde realizaron un mitin en el marco de los 50 meses por la desaparición de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala.