Trinidad Zamacona

En México todas las universidades públicas del país cobran cuotas de inscripción y otros conceptos, además de que los demás subsistemas también lo hacen, el presupuesto asignado es insuficiente para el sostenimiento de estas.
La autonomía está consagrada en el artículo3º de la Constitución de la Política de los Estados Unidos Mexicanos, pues en su fracción séptima establece claramente que las universidades y las demás instituciones de educación superior a las que la ley otorgue autonomía, tendrán la facultad y la responsabilidad de gobernarse a sí mismas, administrarán su patrimonio de manera responsable por lo que compete a los propios universitarios a través de su Consejo Universitario como máxima autoridad el proponer las reformas a la ley, a los estatutos o reglamentos.
Luego entonces la autonomía es la independencia política y administrativa de una universidad pública respecto de factores externos, y con base en ese reconocimiento como la máxima casa de estudios reconocida en la Constitución Política de México y del Estado de Guerrero, debe de estar blindada de ataques o intromisiones de los poderes del Estado o de cualquier ente que pretenda vulnerar su autonomía, por más derechos que este tenga, pues la finalidad de la autonomía es la protección interna y externa de cualquier intensión de desestabilizar a dicha institución educativa.
Si recordamos que cuando se ha reformado la ley orgánica de la Universidad siempre ha existido coordinación, es decir participan los universitarios con sus congresos, el poder ejecutivo con su iniciativa y el poder legislativo con la suya de ahí que se lleva a cabo de manera coordinada dichas reformas, pero no de manera unilateral, eso es lo que rompe con la relación institucional que se ha traído como universidad con todos los poderes del Estado, y los organismos autónomos.
De aprobarse dicha iniciativa abusando de que tienen mayoría en el Congreso colapsaría el sistema educativo no tan solo universitario sino también de los demás subsistemas de nivel medio, y medio superior que imparte la Secretaría de Educación Pública como los CETIS, CBTIS, CONALEP, CECyTEG, así como el sistema Cobach, si llegara a prosperar esta propuesta los padres de familia de esos subsistemas también pedirían que ellos sean exentados de todos los cobros, ahora bien si la iniciativa fuera de que a la universidad a cambio de no cobrar lo que señala el diputado Sandoval se le incrementaría el presupuesto, pues bienvenida dicha propuesta, de lo contrario provocaría que el sistema universitario estuviera destinado a desaparecer, lo que sería lamentable, pues más de un universitario saldría a la calle a dar la cara por la universidad pidiendo y exigiendo el respeto a la autonomía que le otorga la Constitución.
Ahora bien la iniciativa del coordinador de la fracción parlamentaria de Partido Movimiento de Regeneración Nacional, viola aún más la autonomía universitaria, pues si bien es cierto que tienen todos los diputados el principio de igualdad parlamentaria en el congreso que va en el sentido de presentar iniciativas de reformas y adiciones de la leyes por la facultad que su norma interna les confiere, eso no es motivo para presentar iniciativas que van en perjuicio de la sociedad, y máxime en perjuicio de los derechos autónomos de los universitarios.
La Universidad Autónoma de Guerrero, es de las universidades del país, que menos presupuesto recibe, tiene el mayor número de estudiantes, es la que menos estudiantes rechaza en cada siglo escolar, tiene los mejores indicadores educativos, en fin hay avances significativos que Sandoval Ballesteros no conoce, de aprobarse dicha iniciativa no les quedara otro camino a los universitarios, más que el de la movilización como la del año de 1960 que encabezo Jesús Araujo Hernández y Juan Alarcón entre otros que lucharon por la autonomía que hoy tiene la universidad, y que a otros les costó su vida. (ANG)