HÉCTOR CONTRERAS
Como decía Pedro Vargas: Muy agradecido, muy agradecido y muy agradecido a nuestros lectores, por su amable y generosa colaboración sobre la siempre bien recordada nevería “Los Alpes”, que en los años 60 del siglo pasado, se localizaba en la avenida Guerrero, casi esquina con la calle de Madero y que hizo la delicia de sus clientes, en su mayoría jóvenes secundarianos, y que por ser un lugar céntrico y agradable y porque en su rockola estaban programadas las canciones de moda, aún muchos paisanos la recordamos con especial cariño.
Habremos de concretar, de acuerdo a la información que ustedes tan amablemente nos han proporcionado, que esa casa fue propiedad de unas señoritas de apellido Neri Castañón, una de ellas se llamó Felícitas y vivían en la calle Madero, a la vuelta de “Los Alpes”.
Coinciden las opiniones que en los años 60, después de la Huelga del Colegio del Estado, abrió sus puertas la nevería “Los Alpes” cuyos primeros dueños fueron un señor que se llamó don Emigdio Adame Camacho y su familia, originarios de Chichihualco que como anota la cordial amiga Fabiola Pólito Nava, tenían su domicilio al final de la calle Galeana:
“Atendía Doña Susy, y un joven llamado Mauro. Íbamos Miguel Zamorano, “Miguelón”, Cora, Misael, Rosa Ortiz y yo. Escuchábamos “Rosas Rojas a Ti”, “Más cómo has hecho”, “Mariposas”, a Janis Joplin, Los Credence, Jimy Hendrix, etcétera… gratos e inolvidables momentos”.
Gustavo Ayala-Guevara Héctor, las naranjadas eran riquísimas. Ahí nos juntábamos Bety López, Clarita Córdova, Raúl Mercado, Alfonso Gíles, Sergio y Luis Luna, “El Meme”, Chano Cuevas, y bueno… me acuerdo de “El Martillito” con Trini López, Ray Coniff, La plaga. No recuerdo el nombre del señor, pero siempre tenía una sonrisa para todos. Un abrazo.
Alberto Gomez: Yo me acuerdo de la Sra. Susy. Ahí llegábamos Edgardo Mercado,Teofilo Calixto, Irineo Reyna, y las chavas Maruca Calva, Maria Elena Contreras, Esthelita Salmerón y escuchábamos música de Rock.
Noemí Trujillo Romero: Susi vive en San Mateo, no sé la calle, pero es muy apreciada, igual fácil te dicen dónde vive, ella fue testiga de muchos romances. Elva Najera: Que tal Héctor, lo que recuerdo es que empezó un matrimonio .la señora Susy y su esposo un mayor pero muy muy amable. Al pasar el tiempo él muere y poco tiempo después la señora se casa nuevamente con un joven. Pasa no mucho tiempo y no supe el motivo por cual la cerraron .ojalá lea esto Aidde Colmenares, ella posiblemente sepa algo. Saludos amigo.
Antonio Humberto Ochoa Susana vive en Lerdo es la esposa del Tioque.
Ernesto Rosas y Muñoz Héctor: Los últimos años de los Alpes fue el sr. Delgado, gerente del Banco del sur y su esposa doña Vale.
Horacio A. Adame: El dueño fue don Emigdio Adame, originario de Chichihualco.
Humberto Q. Calvo Memije: Fueron los dueños efectivamente un matrimonio de Chichihualco, tenían una hija preciosa, y efectivamente la que atendía por mucho tiempo es la esposa de mi tío Ernesto Memije el tioque, viven en la calle de Lerdo.
Rolando Añorve: Héctor Contreras recuerda que fuimos mínimo tres generaciones de jóvenes que pasamos por ese. Nosotros fuimos, entre otros: Rubén Iturbe, Alfonso Montaño, Alfredo Arcos, Esaú Tapia, José Abarca, ni Enrique Abarca, Raymundo Abarca QEPD, el famoso Tíjolo.
Alejandro Cervantes: Si no mal recuerdo el dueño era Emigdio Adame Camacho y eran de Chichihualco.
A raíz de toda esta valiosa información, y contando con el apoyo de nuestro entrañable amigo el profesor Guillermo Temelo López, acudimos a dialogar con su primo hermano, don Eustacio Ojeda Temelo quien es la persona que nos proporcionó los datos de las señoritas Neri Castañón, que fueron las propietarias del local.
En efecto, don Emigdio Adame con su esposa fueron quienes rentaron el local y abrieron “Los Alpes”, como nevería, cafetería y restaurante, recordando que ahí se pusieron de moda las “enchiladas suizas”.
El negocio fue vendido años después a don Roberto Chávez y fue el señor Eustacio Ojeda Temelo quien compró el negocio en 1974 en 5 mil pesos. “Los Alpes” permaneció abierto hasta el año de 1980.
Al parecer –de acuerdo a la versión de don Eustacio- fue la señora Lucy Neri de Castañón quien compró la casa a las señoritas Neri Castañón, habiendo una cláusula en la que se acordaba que ellas cobrarían la renta hasta su fallecimiento, pero también al parecer hubo presión para que no fuera así y pidieron ellas a don Eustacio que entregara el local.
Los dueños del restaurante “Impala” se ofrecieron para que el señor Eustacio guardara en su local los muebles de “Los Alpes” y ahí se quedaron para siempre. Y es como termina la era de “Los Alpes”… Y colorín colorado.
Agradecimiento a todos por su amable colaboración.