GILBERTO GUZMÁN

 

El delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), José Manuel Armenta Tello, señaló que por errores en el censo de damnificados por los huracanes ‘Ingrid’ y ‘Manuel’ de septiembre del 2013, a cuatro años hay más de 3 mil familias pidiendo que se les reubique o reconstruya su vivienda, pero en el Fonden sólo aparecen con daños parciales.

En entrevista, explicó que en materia de infraestructura vial y urbana, la Sedatu ha ejecutado 16 mil 776 acciones, que fue el diagnóstico que se hizo en el 2013 después de las afectaciones por las lluvias.

“A cuatro años, así lo ha manifestado el Consejo de Comunidades Damnificadas de la Montaña, que hubo una buena cantidad de viviendas que no fueron censadas en un importante número de comunidades”, dijo el funcionario.

Detalló que sólo se encontraron 16 mil 776 viviendas censadas, que fueron incorporadas a una carga de trabajo en el Fonden, pero hay comunidades en Chilpancingo que lamentablemente no fueron incorporadas, como San Vicente, Chicahuales, y otras en donde lamentablemente se hizo censo pero no se incorporó a la carga de trabajo del Fonden, es decir, como no se registraron no se programó presupuesto para ellas.

Sin embargo, Armenta Tello dijo que se han hecho trabajos para que a través de otra oferta institucional, y con la incorporación de otros niveles de gobierno, se pueda abrir la posibilidad de atender a esas comunidades de Chilpancingo que quedaron desamparadas por la delegación de Sedatu, que entonces encabezaba el diputado priísta Héctor Vicario Castrejón.

El funcionario afirmó que en el tema de la reconstrucción de Guerrero lo que sigue es retomar el paso, continuar con el trabajo, superar la dificultad para enfrentar el gasto operativo del Fonden, cuyos trabajadores en la delegación Guerrero ha amagado con recurrir a acciones radicales porque no les pagan salarios de varios meses.

También aclaró que se han recibido solicitudes de cambio de daños en las viviendas afectadas por las lluvias de septiembre del 2013, debido a errores que se cometieron en el censo, pero el Fonden se ha negado a hacer cambio de daños.