* Piden a las autoridades agilicen las investigaciones del caso donde perdió la vida junto con Darwin Barrientos

 

Alejandro Pasión

 

Con una marcha pacífica que partió del monumento a Las Banderas hacia el zócalo, familiares, vecinos y conocidos del joven Isaac Peralta “Tik”) Salinas, demandaron que la Fiscalía General del Estado (FGE), agilice las investigaciones del caso, ya que a una semana de haber ocurrido el doble crimen aún no hay detenidos.

Como se informó en medios de comunicación, el miércoles de la semana pasada Isaac y su amigo Darwin Barrientos viajaban en una moto por la lateral del bulevar “Vicente Guerrero”, cuando fueron atacados frente a una tienda ‘Oxxo’, a pocos metros del puente de la calle Ayutla.

En la marcha, los asistentes vestidos con playeras y globos blancos, de manera insistente exigieron justicia y que sean sancionados los servidores públicos y elementos policiacos por no cumplir con el protocolo de atención a víctimas que por normatividad deben implementar las autoridades denominadas “primeros respondientes”.

Una fuente consultada al inicio de la caminata, quien portaba una fotografía del joven fallecido, se quejó por el trato inhumano que en su momento recibieron las víctimas y ahora los familiares que piden encarecidamente a la FGE, les devuelvan la motocicleta de Isaac, así como sus pertenencias personales.

El entrevistado dijo que incluso las credenciales e identificaciones oficiales de su familiar se las han negado y ellos las necesitan para realizar trámites obligatorios del joven fallecido, quien dejó en orfandad a su esposa y dos niños; uno de 9 y otro de año y medio.

La fuente sostuvo que en vida, Isaac Peralta Salinas, laboraba en la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), hace no mucho tiempo se incorporó al Club de Motociclistas de Chilpancingo y siempre le gustaba hacer amigos, era tranquilo y ajeno a los pleitos.

Señaló que con la marcha, también buscan que la gente salga a las calles a manifestarse y a exigir a las autoridades seguridad, tranquilidad y paz social para que vuelvan a salir a divertirse, al cine o realizar actividades de esparcimiento sin miedo a sufrir algún atentado.

Lamentó que el temor esté tan arraigado, que no salgan ni a cenar con sus familias, a realizar compras nocturnas o simplemente caminar por las calles del centro, “porque la incertidumbre cada vez se adueña más de las familias chilpancinguenses”. (ANG)