* La intervención de policías estatales evitó que de los insultos pasaran a las agresiones físicas, ayer en la comisaría de El Ocotito

 

Redacción

 

Un nuevo enfrentamiento entre los grupos de civiles armados del Frente Unido por la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG) y de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) estuvo a punto de registrarse este viernes, afuera de la comisaría de El Ocotito, por lo que fue necesaria la intervención de policías estatales, quienes formaron un cerco entre ambos grupos para evitar agresiones.

Ayer, miembros y simpatizantes del FUSDEG marcharon en El Ocotito para demandar a las autoridades estatales la salida y el desarme del grupo de la UPOEG que opera en el poblado al mando de José Deivid Barrientos.

En la marcha participaron unas 500 personas de El Ocotito y poblados cercanos como Tierra Colorada. Partió de la base que mantienen a un costado de la carretera federal México-Acapulco, en los límites con Mohoneras, hacia el centro de esa comunidad.

Avanzaron por la carretera gritando consignas en contra de la UPOEG y de respaldo a Salvador Alanis, líder del FUSDEG, a quien le refrendaron su apoyo mediante pancartas y mantas. Después, recorrieron la calle principal de El Ocotito y retornaron hasta la plaza central donde se encuentra la comisaría.

Al llegar, intentaron ingresar a las instalaciones de la comisaría, donde encontraba un pequeño grupo de simpatizantes de la UPOEG con armas, pero fueron civiles los que con palos impidieron que los simpatizantes del FUSDEG ingresaran.

La situación se tensó durante varios minutos, en los que se registraron empujones y jaloneos, principalmente entre mujeres de los dos grupos, hasta que intervinieron elementos de la Policía Estatal que se encuentran destacamentados en el pueblo, precisamente para evitar este tipo de choques.

Ya calmados los ánimos, realizaron un mitin para reiterar su rechazo a la presencia de la UPOEG en el valle de El Ocotito.

“A los compañeros del mercado, a los compañeros tianguistas, al transporte colectivo de taxis, al transporte colectivo de la sierra, es hora de que despierten, a menos que quieran seguir sometidos, como anteriormente lo vivíamos hace tres años, si eso quieren, quédense callados”, aseguró ante los presentes el profesor Silvestre Plancarte, incondicional de Salvador Alanís.

Acusó que entre la UPOEG hay gente extraña que llegó a El Ocotito para realizar las mismas prácticas, como el cobro de cuota a los comercios y empresarios.

La gente en El Ocotito teme que se registre otro hecho violento como la emboscada del pasado 24 de octubre en Tlayolapa, municipio de Juan R. Escudero, que dejó un saldo de  7 muertos y 6 heridos, la mayoría de ellos miembros de la UPOEG.

La marcha del FUSDEG se produjo apenas unas horas después de que ya entada la noche del jueves desarmaron a un grupo de ocho policías municipales de Juan R. Escudero “porque ingresaron a un área que no les corresponde”, justificaron. (Con información de agencias API y Notymás)