* El alcalde de Chilpancingo dijo que “tenemos cinco meses platicando con ellos, cinco meses que han sido momentos de mucha tensión, de mucha dificultad”, pero que gracias a eso han evitado al menos 3 enfrentamientos

 

* Aceptó que el conflicto ha escalado a tal grado que es necesaria la intervención coordinada de los gobiernos municipal, estatal y federal, así como de los poderes Legislativo y Judicial

 

Alondra García / Fernando Hernández

 

El conflicto entre policías comunitarias en Petaquillas y El Ocotito ha escalado de magnitud, pues se trata de “dos fuerzas armadas enfrentadas”, admitió el alcalde de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena, quien consideró que “la tolerancia a estos grupos” ha provocado que se armen con rifles de uso exclusivo del Ejército.

En entrevista con diversos medios de comunicación, el primer edil dijo que gracias a la intervención de las autoridades no se han registrado más muertes en la confrontación que mantienen los dos grupos del Frente Unido por la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), que operan de manera paralela en Petaquillas y El Ocotito.

“Tenemos cinco meses platicando con ellos, cinco meses que han sido momentos de mucha tensión, de mucha dificultad. Ya hemos evitado tres enfrentamientos armados, salvo uno en Petaquillas que no lo pudimos evitar porque realmente no nos avisaron, fue de imprevisto”, comentó Leyva Mena.

Reconoció que en los últimos cinco meses tanto Petaquillas como El Ocotito “han representado complicaciones serias, agravadas, sin paz ni estabilidad debido a que dos fuerzas armadas están enfrentadas”.

Indicó que las policías comunitarias surgieron en Chilpancingo hace cuatro años y reconoció que “de alguna manera han bajado los índices delictivos”.

Sin embargo, señaló que “la tolerancia a estos grupos” ha provocado que se armen con rifles de uso exclusivo del Ejército y que con ello crezca la tensión entre las diferentes agrupaciones.

Esta situación, dijo Leyva Mena, se agravó con el cambio de comisarios en ambas comunidades, ya que ambos grupos armados “tratan de apoderarse del corredor que va de Xaltianguis, Tierra Colorada y El Ocotito, hasta Petaquillas”.

El alcalde capitalino advirtió que el conflicto ha escalado a tal grado que es necesaria la intervención coordinada de los gobiernos municipal, estatal y federal, así como de los poderes Legislativo y Judicial.

Para Leyva Mena, la estrategia debe enfocarse en regularizar a las policías comunitarias y normar su funcionamiento.

Cuestionado sobre el asesinato de Julio Alarcón Astudillo, quien fuera transportista y comandante del FUSDEG, el alcalde descartó que este relacionado con la toma de protesta del nuevo comisario de El Ocotito, Román Badillo Abarca, en sustitución de Audifred Benítez quien renunció tras sobrevivir a un ataque armado el 10 de septiembre.

Recordó que “el Cabildo en pleno le dio posesión a quien habían acordado las partes que iba a ser el suplente y nosotros le dimos porque por derecho le correspondía ese lugar, sin embargo horas después fue asesinado en el Mercado de San Francisco un comandante de Petaquillas que no tiene nada que ver con el asunto del comisario de El Ocotito”.

Consideró que el homicidio de Alarcón Astudillo se trató de “una situación aislada del asunto político de El Ocotito”, y no descartó la posibilidad de que “pudiera estar relacionado con los enfrentamientos grupales entre las policías comunitarias”.

Repunta la violencia en Chilpancingo

Leyva Mena reconoció que en los últimos días se ha registrado un repunte de violencia en la capital. “Son picos de violencia, hay ratos de estabilidad, a veces está a la baja y a veces sube, como es el caso en este momento”, explicó.

De acuerdo con el presidente municipal, este repunte obedece a varios factores y uno de ellos es el enfrentamiento entre “grupos armados”.

Por ello, advirtió la necesidad de mantener la coordinación permanente entre el gobierno municipal, la Fiscalía General del Estado, el Ejército y los cuerpos federales de seguridad, así como perfeccionar la estrategia de seguridad.

En lo que compete a la autoridad municipal, destacó que se han fortalecido tareas encaminadas a la prevención del delito, como son la instrumentación de una Policía de Proximidad, la creación de comités vecinales, la implementación del Programa Vecino Vigilante y la instalación de alarmas.

Leyva Mena detalló que la Policía Preventiva Municipal cuenta con apenas 119 elementos, que se dividen en dos turnos para brindar seguridad a la ciudadanía.

Respecto a su seguridad personal, indicó que cuenta con una camioneta blindada que recibió del alcalde anterior, Mario Moreno Arcos y con tres guardaespaldas.