* Al presentar su primer informe de gobierno, el alcalde de Chilpancingo propuso un gran pacto político para trabajar, con honestidad y compromiso, en una agenda política contra la pobreza, la marginación y el atraso
* Aseguró que bajo el liderazgo del gobernador Héctor Astudillo, “y compartiendo ideas y recursos, esta ciudad deberá de salir adelante”
Redacción
Las críticas “las recogemos con respeto cuando las orienta el deseo de corregir rumbos de la política pública”, pero es lamentable que en ocasiones esos señalamientos sean movidos “desde diferentes ángulos de la geometría política, de los intereses creados” sin medir el daño causado, aseguró ayer el alcalde Marco Antonio Leyva Mena al rendir su primer informe de laboral, durante el cual dejó bien claro que “no he llegado aquí para dejarme vencer por la realidad, no he luchado muchos años para hoy atemorizarme ante lo complejo de la ciudad, ni a dejarme vencer por ataques infundados”.
En un auditorio Sentimientos de la Nación al cual asistieron el secretario general del Gobierno, Florencio Salazar Adame, en su condición de exalcalde de Chilpancingo, lo mismo que Jorge León Robledo y José Luis Peralta Lobato, además del representante del Ejecutivo, Alejandro Bravo, y el exdiputado federal Manuel Añorve Baños, el primer edil capitalino hizo un recuento puntual de las diversas acciones que ha realizado en este primer año de gestión y admitió enfrenta una gran complejidad en el manejo administrativo y político del gobierno municipal.
Entre los problemas que le ha tocado enfrentar, indicó, se encuentra en la inseguridad pública, los conflictos entre las policías comunitarias, la basura, la escasez de agua potable y la iluminación de la ciudad.
Leyva Mena detalló que, desde octubre del año pasado, el gobierno municipal ha ejercido cerca de 681 millones de pesos, de los cuales 418 fueron de gasto corriente y sólo 262 de gasto de inversión.
Indicó que en el actual ejercicio fiscal el municipio tiene un presupuesto que apenas llega a los 150 millones de pesos, es decir, que cerca del 80% es para gasto operativo
Dentro de las acciones de su administración, puntualizó que se han conformado 10 consejos ciudadanos y se realizaron 39 jornadas comunitarias para la recuperación de espacios públicos.
El alcalde capitalino definió su administración como un gobierno popular democrático y solidario con los que menos tienen en ese sentido destacó la creación de los programas Uno a Uno y Piso Firme.
Indicó que con el programa piso firme se han beneficiado 284 familias mientras que en el de techo seguro que tiene un registro de 2 mil 664.
En lo que corresponde al programa de escrituración, dijo que 640 familias ya cuentan con la certeza de su propiedad.
También destacó que el Cabildo plural autorizó la creación del Instituto de Vivienda de Chilpancingo (Invich), el cual beneficia a la población de escasos recursos y los ayuda a adquirir una vivienda, construir en terreno propio, lograr la certificación de títulos y los provee de materiales de construcción a bajo costo.
En materia educativa, detalló que se logró una coinversión con el gobierno del Estado de hasta 27 millones de pesos; también presumió la construcción de infraestructura en Petaquillas y en Chilpancingo en la escuela ‘Partido Revolucionario Institucional’, en el jardín de niños ‘Leonor López Orellana’ y en la Escuela Primaria ‘Lauro Aguirre’.
En lo que refiere a Salud Municipal, destacó la rehabilitación de 12 centros de salud, de los cuales 9 se encuentran en la zona urbana y 3 en áreas rurales. En este rubro destacó la inversión de casi un millón de pesos en el hospital de El Ocotito.
En el área cultural anotó que se ha impulsado el programa Desde el Centro, con actividades artísticas cada 15 días; destacó que este año se realizará por segunda ocasión consecutiva el Festival de Otoño y que con el apoyo del gobernador Héctor Astudillo Flores, Chilpancingo se convirtió en la primera ciudad que realiza el Festival Internacional de Poesía.
Leyva Mena destacó el apoyo que ha recibido de parte del gobernador Héctor Astudillo Flores para impulsar el rubro de obra pública. “Bajo su liderazgo y compartiendo ideas y recursos, esta ciudad deberá de salir adelante”, expresó.
También presumió que en materia de impulso a las comunidades ha buscado resolver las problemáticas de fondo, para atacar la pobreza y la desigualdad en el campo.
Explicó que en las comunidades de Santa Rita, San Miguel, Santa Bárbara y San Cristóbal se repartirán 7 mil 500 plantas de limón, en una superficie de 30 hectáreas; en tanto que las localidades de Jaleaca, Chicahuales, Amojileca, Azinyahualco, Coapango y Xocomanatlán se beneficiarán con 10 mil plantas de aguacate.
El alcalde presumió la derrama económica que dejará el programa Plan Vivienda en el conjunto habitacional Jardines de Zinnia, que será superior a dos mil millones de pesos; además de la derrama que generará la construcción del hotel Holliday Inn, la cual superará los 150 millones de pesos.
El edil reconoció que el reto es mayúsculo en materia de seguridad. Por ello destacó la certificación de 119 policías, su capacitación en derechos humanos y en el nuevo sistema de Justicia penal, la homologación de sueldos, becas, útiles escolares, uniformes nuevos y estímulo a la vivienda.
También destacó la instalación de 48 alarmas vecinales y la implementación del programa vecino vigilante en 160 colonias, así como la construcción de dos bases operativas policiacas.
De acuerdo con Leyva Mena, gracias a la coordinación entre los cuerpos de seguridad de los tres niveles de gobierno el homicidio doloso bajó en más del 25%, en tanto que el secuestro y la extorsión van a la baja en la capital.
Uno de los temas en los que hizo hincapié, fue el de la basura. Aseguró que su administración ha hecho el mayor esfuerzo por resolver el asunto de la recolección y destino final de los residuos.
Precisó que “existe una celda emergente construida en su totalidad y con todos los permisos vigentes, salvo los que corresponde dar al municipio de Tixtla. Si existiera la voluntad política de hacerlo, el problema estaría resuelto el día de mañana. Hoy los argumentos son personales, no técnicos, con intereses políticos individuales y partidistas y la argumentación bajo esos criterios es infinita hasta las fronteras de lo absurdo”.
En su mensaje político, Leyva Mena reconoció que este año ha sido de una gran complejidad financiera y social, pero también de una gran complejidad en el terreno político, debido a las aspiraciones “a destiempo y sin cuartel” de varios personajes que pretenden ocupar el cargo que hoy ocupa, aunque no los identificó.
Aseguró que él no gobernará preocupado por los índices de popularidad, sino por la resolución de los problemas que aquejan a la ciudadanía.
Enseguida, Leyva Mena propuso “una tregua para formar un gran pacto político, de honestidad y compromiso, para crear una agenda política contra la pobreza, la marginación y el atraso”.
Dicha tregua, dijo, sería convocada por el Consejo de Participación Ciudadana y estaría abierta a organizaciones, personajes de la política, colegios de profesionistas, amas de casa, campesinos y ciudadanía en general de las diferentes expresiones políticas, incluso las de oposición.
Consideró que los “intereses aviesos que hoy le disputan el poder al estado” buscan generar una división en la sociedad, con disputas estériles disfrazadas de problemas sociales reales.
Entonces Leyva Mena señaló que “la presente administración ha recibido críticas muy duras, quizá históricas, que recogemos con respeto cuando las orienta el deseo de corregir rumbos de la política pública”, pero lamentó “que a veces esas críticas, movidas desde diferentes ángulos de la geometría política, de los intereses creados, sean en términos personales para mí, mi familia y mis colaboradores, sin medir el daño causado”.
El alcalde capitalino envió también un mensaje a quienes aseguran que pronto dejará el cargo, al asegurar que “está acostumbrado a trabajar en la adversidad y la tormenta”, y que llevará a su gobierno “a buen puerto, en tiempo y forma, en el plazo establecido”.
Leyva Mena comentó que le daría vergüenza que al concluir su periodo como presidente municipal, Chilpancingo quedara con los niveles de inseguridad que actualmente tiene, o con poca cobertura de agua y sin mejorar las condiciones para un futuro más digno para las generaciones que vienen.
“No he llegado aquí para dejarme vencer por la realidad, no he luchado muchos años para hoy atemorizarme ante lo complejo de la ciudad, ni a dejarme vencer por ataques infundados. No me amilana el reto ni el tamaño del desafío, ni la intriga, ni la mentira, ni la perversidad elucubrada en los pasillos de la mala política, ni mucho menos el no tener cargos futuros. Mi verdadera apuesta es la gente.
“Esta barca avanza, los vientos son fuertes y aún en medio de la tempestad, es un privilegio servir a Chilpancingo”, concluyó el alcalde capitalino.