* Los permisionarios de autobuses urbanos y taxis afirman que el aumento a la tarifa sería solo un paliativo ante los ‘gasolinazos’
ANA LILIA TORRES
ACAPULCO.— Permisionarios de autobuses urbanos y taxis de Acapulco informaron que es cuestión de días para que la Comisión Técnica de Transporte y Vialidad del estado anuncie el resolutivo del estudio sobre la petición de un aumento de tarifa para el transporte público del estado.
Fernando Palacios Nájera y Esteban Rodríguez Flores, dirigentes de la Central de Transporte del estado de Guerrero y de la Unión de Concesionarios y Trabajadores del Volante del Transporte Público, respectivamente, señalaron que confían en que el resultado sea la autorización del alza de tarifa.
El aumento vendría a ser un paliativo, en el caso del transporte de Acapulco, dado que desde hace tres años no les han autorizado ningún ajuste tarifario que les compense de las pérdidas que sufren por el constante incremento en los precios de aceite y gasolina, expresaron.
Palacios Nájera manifestó que las autoridades intentan hacer creer que no es gravoso el aumento de gasolina anunciando un alza de centavos, sin embargo, los permisionarios del transporte surten no uno ni dos, sino cientos de litros de gasolina diarios, por lo que sí resienten este gasto.
A su vez, Rodríguez Flores señaló que lo que más golpea los bolsillos de los transportistas es que los despachadores de las gasolineras no surten los litros completos y si hubiera un control oficial en el funcionamiento de las bombas, el aumento de precio en el combustible no tendría tanto impacto.
Por ello, manifestó que el alza de tarifa que sería de un peso, para elevar de 7 a 8 el pasaje en camiones urbanos y de 14 a 15 pesos en taxis colectivos, mitigará un poco la difícil situación económica del gremio transportista.
“Tengo entendido que en pocos días habrá de salir el resolutivo del estudio de la petición de aumento y yo tengo confianza en que nos dará la razón para autorizarnos el alza de tarifa”, enfatizó Palacios Nájera.
Los dirigentes transportistas manifestaron que la situación que enfrentan es tan delicada, que a pesar de la inseguridad no han dejado de dar servicio nocturno, por necesidad económica.
“Lo que nos van a dar es un paliativo; nosotros quisiéramos más para poder subsistir, pero sinceramente no creemos que nos autoricen más de un peso, porque la población usuaria del servicio está viviendo una difícil situación económica y no puede absorber más incrementos”, dijo Rodríguez Flores.