Salvador Bello
Integrantes de la organización civil “Levantemos Chilpancingo”, declararon que hay una emergencia de salud social y ambiental en este municipio, derivado por el problema de la recolección, separación y destino final de la basura, y con fundamento en el artículo 49 de la Ley Orgánica del Estado de Guerrero solicitaron al Ayuntamiento la instalación de una sesión de Cabildo abierta para atender la situación.
La problemática del basurero surgió hace algunos años cuando llegó a su máxima capacidad, sin embargo, hasta el momento las autoridades no han podido encontrar otro predio donde construir uno nuevo, por lo que la saturación del actual está presentando un impacto político para la naturaleza.
Igualmente, a diario existe una gran cantidad de capitalinos que dejan su basura en la calle para que el camión recolector se la lleve, no obstante, en los últimos días se han presentado problemas con el servicio, por lo que se han podido apreciar montones en la vía pública que se convierten en foco de infecciones.
En conferencia de prensa, señalaron que la problemática que se enfrenta al respecto, ha derivado en un latente riesgo de salud pública, daño ecológico, y conflicto social; consideraron inadmisible permanecer pasivos y observadores esperando que llegue el desastre.
“Hoy nos llama nuestra responsabilidad y nuestra conciencia para actuar de manera inmediata ante este grave problema que merece ser atendido urgentemente: simple y sencillamente el destino final de los residuos sólidos (es decir, el basurero) que opera está totalmente rebasado y en colapso”, dijeron.
Señalaron que por eso recurrentemente se encuentran tiraderos en diferentes puntos de la ciudad, en carreteras aledañas y en algunas barrancas, ocasionando un eminente problema social, ambiental y de salud.
Hicieron un llamado para atender esto de manera inmediata y se le dé una solución precisa al problema, “es una realidad, no es una postura sensacionalista o alarmista, entendemos que estamos ante una contingencia”.
Como organización civil “Levantemos Chilpancingo” realizó una declaratoria de emergencia de salud social y ambiental en la capital y con fundamento en el Artículo 49 de la Ley Orgánica del Municipio del Estado de Guerrero solicitaron vía oficio al Cabildo la instalación de una sesión abierta con carácter de permanente a efecto de poder atender la emergencia.
Además, apelaron a la sensibilidad y solidaridad de los municipios hermanos de Eduardo Neri y de Tixtla, para que conjuntamente con el Chilpancingo trabajen en la búsqueda de propuestas y encuentren unidos la mejor solución para lograr un depósito de residuos sólidos intermunicipal que beneficie a los 3 municipios, pero que además sea la oportunidad para plantear el desarrollo integral de esta región.
Convocaron a la sociedad civil, instituciones académicas, investigadores y a grupos organizados de los 3 municipios a participar “buscando la gobernanza como un ejercicio indispensable en los tiempos que se viven”, pues consideraron que es el momento de sumar voluntades, de separar intereses propios y de solidarizarse todos los capitalinos con la causa.
El presidente de la organización, Francisco Osorio Flores, señaló que no conocen el proyecto del nuevo destino final para residuos sólidos y reclamó que el alcalde se ha negado a recibirlos para acudir al evento del Grupo Aca en Acapulco, por lo que opinó que existe “indolencia” hacia este problema.
Resaltó que ahora el Cabildo de Tixtla se niega al basurero debido a la misma “falta de sensibilidad” del gobierno priista municipal, mientras que Tulio Estrada Apátiga dijo que es evidente que hubo una “falta de trabajo político”.