* Estudiantes de la Normal de Ayotzinapa y otras organizaciones sociales convocaron a una marcha en Tixtla para este día, a la misma hora que está programado el desfile cívico-militar

 

ALONDRA GARCÍA

 

Ante la advertencia de estudiantes de Ayotzinapa, padres de los 43 normalistas desaparecidos y miembros de la FECSM de que boicotearán el desfile cívico-militar que cada 9 de agosto se hace para recordar el natalicio del general Vicente Guerrero Saldaña, el gobernador Héctor Astudillo Flores les hizo un llamado para que permitan la realización del evento, porque es una celebración de todos los guerrerenses.

“El 9 de agosto es un evento de los guerrerenses. El gobierno está interesado en que recordemos a Vicente Guerrero como lo merece, como lo que es: el máximo héroe de los guerrerenses, pues al final de la lucha por la Independencia es quien consolida la liberación de México ante España”, aseguró ayer el mandatario al concluir el homenaje a la bandera en palacio de gobierno.

Insistió en que la imagen del consumador de la Independencia de México no es patrimonio del gobierno ni de ninguna organización social, y que el desfile cívico-militar no representa por ningún motivo el olvido del Caso Ayotzinapa por parte de su gobierno.

“Sigue la reprobación, sigue la exigencia de que se castigue a quienes participaron en este acontecimiento y también aspiramos a que se sepa la verdad, que se nos diga en dónde están los 43 jóvenes desaparecidos”, refrendó.

El desfile está programado para las 8:00 horas de este martes en la cabecera municipal de Tixtla. Para el acto se contempla la participación de mandos y elementos militares, así como de políticos y funcionarios de los tres niveles de gobierno.

A través de las redes sociales, los normalistas de Ayotzinapa y los padres de los 43 convocaron a las organizaciones sociales, civiles, sindicales, estudiantiles, barrios, colonias, comunidades artísticas y ciudadanía en general a participar en una marcha-mitin, como una celebración popular alterna del 234 natalicio del general Vicente Guerrero.

La marcha popular está programada para salir a las 8:00 de la mañana del arco de entrada a la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, misma hora a la que está convocado el desfile cívico-militar.

Por su parte, la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) difundió un comunicado en el que llamaron a sabotear el acto oficial.

Las 17 normales que integran el FECSM exhortaron a la ciudadanía a participar en el desfile convocado por Ayotzinapa y no en el acto oficial.

Argumentaron que los hechos ocurridos la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014 en Iguala, que dejaron como saldo seis muertos y 43 normalistas desaparecidos, “fueron y serán una cloaca que destapó la corrupción en todos los niveles de gobierno, demostrando la participación del Estado en asesinatos, torturas, desapariciones forzadas”.

Insistieron en que el Caso Ayotzinapa visibilizó la participación del Estado en asesinatos, torturas y desapariciones forzadas de ciudadanos, y dejó en claro la relación entre las autoridades y grupos de la delincuencia organizada.

“Los políticos, desde alcaldes, gobernadores y cúpulas del gobierno son parte del lavado de dinero, tráfico de drogas, tráfico de blancas y para callar las protestas usan la represión”, sentenciaron en su comunicado.

La FECSM aseguró que no permitirá que el Caso Ayotzinapa quede impune y advirtió que realizará actos de protesta y boicot a eventos oficiales.

“No permitiremos que entren este 9 de agosto a la ciudad de Tixtla los políticos, milicias y policías en general que hacen el trabajo sucio, donde tenemos 14 compañeros de los 43 desaparecidos. Hacemos responsables a los tres niveles de gobierno de lo que se pueda desatar ese día”, concluye el comunicado.

El rechazo al Ejército se acrecentó tras la publicación del libro La guerra que nos ocultan, de los periodistas Francisco Cruz, Félix Santana y Miguel Ángel Alvarado.

En su investigación, los periodistas descubrieron que el celular de Julio César Mondragón Fontes, el normalista desollado, estuvo en el campo militar 1, funcionó hasta el 4 de abril de 2015 y fue usado para espiar a los contactos de la víctima. Por ello, los normalistas rechazan el ingreso del Ejército a la ciudad de Tixtla.

Ante las amenazas de boicot, el gobernador Héctor Astudillo Flores solicitó a los estudiantes de Ayotzinapa, padres de los 43, FECSM y organizaciones que los respaldan que no impidan el desfile cívico-militar para conmemorar el 234 aniversario del general Vicente Guerrero Saldaña.