*Entre ellos un joven de 14 años de edad; familiares de las víctimas aseguraron que pidieron ayuda a las autoridades pero nunca recibieron apoyo
* Bruno Plácido, dirigente de las autodefensas, expresó que son falsas las versiones sobre el ataque
Sujetos armados habrían emboscado y asesinaron a balazos a cinco elementos de la Policía Comunitaria de la Unión de Pueblos Organizados del Estado de Guerrero (UPOEG) cuando viajaban a bordo de una camioneta sobre una carretera de terracería, a unos 500 metros del poblado de La Venta, en el municipio de Heliodoro Castillo (Tlacotepec), de la Sierra de Guerrero.
Los hechos ocurrieron durante el pasado sábado, pero no fue sino hasta ayer cuando la información fue proporcionada por diferentes agencias de noticias.
De acuerdo con la esposa de uno de los asesinados, César Joaquín Marcelo Guerrero, de 14 años de edad; Martín Ramírez Gregorio, Leonardo Guzmán Marcelo, Rafael Trujillo Ramírez y Luis Alberto Ramírez Marcelo, todos habitantes del poblado de La Vuelta, se dirigían hacia la comunidad de Filo de Caballos sobre una camioneta roja de la marca Nissan, de doble cabina.
Sin embargo, poco después de salir de su poblado, un grupo de hombres fuertemente armados que ya los estaban esperando, los rodearon y dispararon contra la camioneta, matándolos al instante.
Debido al ataque, la carrocería de la unidad presentaba decenas de orificios producidos por los impactos de arma de fuego, de calibres de alto poder.
Familiares de las víctimas aseguraron que pidieron ayuda a las autoridades para que les mandaran vigilancia al poblado, ya que temían que el grupo armado fuera a atacarlos, pero nunca recibieron apoyo, por lo que trasladaron los cuerpos a sus hogares y les dieron sepultura.
Las víctimas dejaron huérfanos a seis niños, la mayoría de apenas 2 años de edad.
Los finados tenían más de un año que decidieron integrarse a la Policía Comunitaria para cuidar su poblado, debido a que habían recibido amenazas por un grupo del crimen organizado, quienes les advertían que los atacarían como ha pasado con otros pueblos en los últimos meses y que ha dejado a varias familias asesinadas.
Tras estos ataques, los pobladores afirmaron que el grupo responsable está al mando de Juan Castillo Gómez, alías “El Teniente”, quienes están acusados de ser los principales atacantes a los poblados de los municipios de Heliodoro Castillo (Tlacotepec) y Lenorado Bravo (Chichihualco).
La unidad donde fueron asesinados los cinco comunitarios, se encuentra en las inmediaciones del poblado donde vivían.
A cinco días de los hechos, los pequeños huérfanos se acercan a la camioneta y mencionan que a bordo de ella, sus padres patrullaban el poblado y sus alrededores para cuidarlos, pero, “ahora nos cuidan desde el cielo”.
Apenas hace un año aproximadamente, cerca del lugar donde fueron emboscados los policías, una familia del poblado de Jaleaca de Catalán, entre ellos una mujer, sus dos niños y dos adultos, fueron asesinados por un grupo armado.
A orilla de la carretera que une los dos municipios serranos solo se observan varias cruces con flores, mismas que son colocadas por familiares de las víctimas de la delincuencia organizada.
Ante estos hechos violentos, ni las autoridades de los municipios ni del estado han informado algo al respecto.
BRUNO PLÁCIDO DESMIENTE ATAQUE
El dirigente de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valerio, desmintió que cinco integrantes de la policía ciudadana hayan sido asesinados en una emboscada en Tlacotepec el sábado pasado, como trascendió en diversos medios.
Vía telefónica, Plácido Valerio negó la veracidad de la información y señaló que las fotos corresponden a un enfrentamiento ocurrido el 6 de noviembre de 2015 en el poblado de Polixtepec, entre policías ciudadanos y el grupo delictivo de los hermanos Villalobos, cuyo líder ya fue detenido, esto a pesar de que está circulando un video en redes sociales dado a conocer por la Agencia Chilpancingo Noticias, en donde entrevistan a una mujer, esposa de un comandante de la Policía Comunitaria, la cual expresa que ninguna autoridad se ha ido a parar tras el ataque.
El líder indígena comentó que mantiene comunicación permanente con los comisarios de los pueblos de la sierra en los que tiene presencia la UPOEG y que ninguno le ha notificado respecto a la supuesta emboscada.
“Eso es falso. Alguien con algún interés está tratando de crear confusión”, aseveró Plácido Valerio.