* El gobernador aseguró que no busca fomentar la impunidad al no detener a profesores de la CETEG, pero tampoco alimentará la confrontación
ANA LILIA TORRES
ACAPULCO.— La suspensión temporal de las órdenes de aprehensión contra los maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) que han incurrido en actos vandálicos en sus manifestaciones contra la Reforma Educativa, no tiene como objetivo fomentar la impunidad, sino evitar una confrontación y facilitar el diálogo con este sector para resolver el conflicto magisterial, aseguró ayer el gobernador Héctor Astudillo Flores.
“De ninguna manera se trata de no aplicar la ley, se trata de entender el problema que se vive” en el estado y abonar para que no crezca un conflicto que, por el contrario, tiene que destensarse, añadió el mandatario estatal.
Luego de que el fiscal Xavier Olea Peláez informó por la mañana que cancela temporalmente las órdenes de aprehensión contra profesores de la CETEG, el gobernador informó que no está rehuyendo a su responsabilidad de aplicar la Ley, sino actuando con cuidado al estar consciente del tamaño del conflicto.
“Soy el más interesado en que no regrese la etapa violenta a Guerrero de confrontación con las organizaciones, en este caso con los maestros”, remarcó el gobernador en conferencia de prensa antes de viajar a la Ciudad de México.
“No soy yo quien está viendo cómo voy a alimentar el conflicto; tampoco ahuyentarse de la responsabilidad. Trato de ser un gobernador consciente y responsable de lo que se tiene que hacer, pero también muy consciente del daño o el problema que se puede generar si no actuamos con cuidado”, enfatizó.
Ante la cercanía de las vacaciones de verano, Astudillo Flores señaló “que estaremos atentos a todos lo que tengamos que hacer para tratar de ayudar y colaborar” para que el conflicto derivado de la inconformidad con la Reforma Educativa no escale en Guerrero.
Manifestó que a ningún gobernador y a ningún ciudadano conviene tener una guerra en las carreteras del estado.
Dijo que abordaría el tema de los maestros con la Federación, porque “de ninguna manera se trata de no aplicar la Ley; se trata de entender el problema que se vive en una parte importante del país o los estados del sur del país, que han vivido circunstancias muy difíciles derivado del conflicto del magisterio”.
Consideró que aunque el conflicto en Guerrero no ha alcanzado las dimensiones que tiene en Oaxaca o Chiapas, es necesario ser muy cuidadoso con todo lo que se hace en torno a esta situación.
“Guerrero no ha escapado a ello, pero no está en la dimensión que ha estado Oaxaca y Chiapas; hoy no somos el primer lugar del conflicto, pero también el gobernador tiene que ser muy cuidadoso de lo que se hace en Guerrero en torno a este asunto”, abundó.
“Insisto, no es un asunto de no aplicar la Ley ni de fomentar la impunidad; es un asunto de tener cuidado, porque los guerrerenses tienen muy presentes la etapa difícil que todavía no superamos en su totalidad, como es el caso de Ayotzinapa”, señaló.
En cuanto a si no se ejecutarán las órdenes contra maestros, sobre todo porque este martes tomaron casetas de la Autopista del Sol, señaló que tanto el fiscal como él no han dicho que no se va a actuar, sino que lo harán con prudencia para no generar una confrontación que agrave el conflicto magisterial.