Temas cotidianos

 

Por Félix J. López Romero

 

Debe frenarse la violencia provocada por cetegistas

 

Las acciones criminales llevadas a cabo por integrantes de la Ceteg, así como quienes simpatizan con ellos, deben ser combatidas hasta su exterminio, porque la tolerancia que las autoridades han tenido con ellos, que hacen y deshacen, desgraciadamente solo miran sus fechorías sin atreverse ponerles un hasta aquí.

La lapidación del edificio del Congreso del Estado, cuya fachada quedó manchada por huevos que le fueron arrojadas, así como la intención de introducirse al palacio de gobierno, dejó clara muestra de su rijosidad, demostrando con tal proceder su rechazo a la reforma educativa, así como a la evaluación del desempeño de los docentes.

En esta ocasión como suele ocurrir, los miembros de su avanzada iban con el rostro cubierto, cual auténticos hampones, tratando de tal manera esconder su identidad. En esta ocasión sabiéndose de antemano cuales eran sus intenciones, elementos de la policía estatal los esperaron fuera de la sede del poder ejecutivo, en donde los atacantes pretendieron introducirse, siendo recibidos con gases lacrimógenos, lo que ocasionó su dispersión.

Por lo que se ha observado, a los maestros nada les importa, porque agreden a quienes le vienen en gana; es algo si como no busco quien me la hizo sino quien me la pague, porque agreden al parejo por lo cual se han ganado el repudio de la población, sobre todo de los chilpancingueños que tienen en cautiverio.

Es deseable que en lo sucesivo los cuerpos de seguridad pública actúan, para poner fin a la violencia ocasionada por los pelioneros cetegistas.