* El gobernador reiteró que la inseguridad es un problema que “hay que enfrentarlo todos los días con una gran determinación”

*Consideró que en un año más, podrá observarse un Guerrero en paz

 

Alondra García

 

Un año más, fue el plazo que el gobernador Héctor Astudillo Flores considera prudente para que pueda observarse en Guerrero la disminución de la violencia e inseguridad que prevalecen en la entidad.

Ayer, el mandatario estatal concedió una entrevista al periodista Carlos Loret de Mola, en el noticiero televisivo Primero Noticias. Los cuestionamientos se enfocaron en la crisis de violencia que enfrenta Guerrero, derivado de la operación de varias bandas del crimen organizado.

El periodista, incisivo, preguntó al gobernador sobre los constantes enfrentamientos, asesinatos y hechos de violencia que ocurren en la entidad, principalmente en el puerto turístico de Acapulco.

-¿Manda usted o mandan los narcos en Guerrero?, inquirió.

– Manda Héctor Astudillo, el gobernador, respondió el mandatario guerrerense.

-¿En todo Guerrero?, insistió.

-En todo Guerrero, sostuvo el gobernador.

-¿En todas las regiones?, volvió a insistir el periodista.

Astudillo Flores explicó entonces que en Guerrero “hay problemas, pero sin duda hay decisiones por parte del gobierno del estado que todos los días se ejecutan”.

El gobernador reconoció que en Guerrero “hay un serio problema” en materia de seguridad, y atribuyó a la “debilidad de las instituciones” que encontró al llegar al poder, “una de las causas”.

“Yo creo que se está haciendo un trabajo serio y responsable. Hay regiones (del estado) en las que ha bajado (la violencia). Acapulco sigue siendo un asunto delicado, pero hay que enfrentarlo todos los días con una gran determinación”, reiteró.

-¿Va ganando o perdiendo?, preguntó Loret de Mola en referencia al combate institucional contra el crimen organizado.

Astudillo Flores respondió “estamos trabajando, luchando todos los días”, y advirtió que, ante la magnitud de los problemas que enfrenta la entidad, resulta necesario el apoyo del gobierno federal.

“Guerrero necesita a la federación, indiscutiblemente; al gobernador de Guerrero sólo, sin la federación, le sería muy complicado gobernar”, reconoció.

Astudillo Flores también aclaró que no hay escuelas cerradas en Acapulco, a pesar de la crisis de violencia e inseguridad que se vive en el puerto. “En este momento, sólo en Acapulco, hay 155 escuelas cuidadas por el Ejército y la Marina, de un total de alrededor de 400. Todas están abiertas”, precisó.

Reconoció que sí hubo suspensión temporal de labores en algunos centros educativos, luego de las balaceras ocurridas la noche del 24 de abril en la Costera de Acapulco, pero aclaró que la suspensión de clases no fue oficial ni necesaria, ya que los hechos de violencia no eran tan graves como se manejaron en las redes sociales.

Aseguró que el cierre de algunas escuelas al día siguiente de esas balaceras se debió a la psicosis que generaron varios mensajes con información falsa que circularon en las redes sociales y no a una situación real de emergencia.

“Algunas escuelas no funcionaron derivado de la crisis. Hubo denuncias que se colocaron (en redes sociales) donde se decía que se suspendían las clases oficialmente, pero también eso fue una mentira armada”, recriminó.

De hecho, consideró que “en Acapulco y en Guerrero” se vive un momento de “normalidad”.

Loret de Mola cuestionó que para muchos guerrerenses “no se nota” una mejoría en las condiciones de seguridad y paz.

-¿Cuánto tiempo pide usted de resistencia a la gente para que Guerrero esté en paz?, preguntó el periodista.

-Yo lo que creo es que el tiempo correcto es un año más, respondió el gobernador.

-¿Y sí va a aguantar Acapulco?, ¿van a aguantar los empresarios?, ¿va a aguantar la gente?

-Yo creo que no hay que dejar de hacer cosas todos los días y enfrentar con una gran determinación a la delincuencia organizada, yo tengo la determinación, señaló.

Astudillo Flores también destacó la necesidad de que la población participe en el combate a la delincuencia, “con mayor determinación en la denuncia”.

-¿Se puede confiar en las autoridades?, le preguntó el periodista.

-Yo creo que se tiene que hacer una determinación de autoconfianza para salir adelante y la autoridad necesita de la sociedad para colaborar con este trabajo que estamos haciendo”.

Astudillo Flores aseguró que a seis meses de que asumió el cargo no ha despegado los pies del piso. “Yo sabía que el asunto no era nada sencillo. Siempre estuve consciente y estoy con los pies sobre la tierra y hago todo lo que tengo que hacer todos los días”, dijo.

También habló sobre la operación de los Centros de Control, Mando, Comunicaciones y Cómputo (C-4) que operaba la Secretaría de Seguridad Pública Estatal y que ahora serán controlados por el Ejército, y justificó esta decisión porque “el Ejército tiene personas más capacitadas y más controles”.

Reconoció que los empleados de los C-4 trabajaban “con mucha relajación” y que el control de las cámaras de vigilancia no daba resultados positivos, pero descartó que los C-4 de Guerrero fueran utilizados por la delincuencia organizada, lo que sí ha ocurrido en otros estados, como Veracruz.

El mandatario guerrerense informó que, además del control de los C-4, el Ejército coordinará las estrategias y trabajos de seguridad en Guerrero, con la participación de la Armada de México, Policía Federal, Gendarmería y Policía Estatal.

Otro tema que abordó Astudillo Flores durante la entrevista fue la propuesta que hizo para legalizar la producción y uso de la amapola con fines medicinales.

“Lo sigo sosteniendo”, expresó el gobernador. Incluso destacó que no se trató “de ninguna ocurrencia”, porque el presidente Enrique Peña Nieto también abrió el debate sobre la legalización de la marihuana.

El mandatario consideró que se debe realizar un programa piloto en Guerrero en el tema de la legalización de la amapola con fines medicinales.

-¿Qué ganaría Guerrero?, preguntó Loret de Mola.

“Que se baje la violencia en mi estado, el que gobierno y el que quiero que mejore”, concluyó Astudillo Flores.