* Durante una visita a la Normal de Ayotzinapa para despedirse de las familias y compañeros de las víctimas, los expertos de la CIDH acusaron que faltó voluntad política al gobierno de México para permitirles hacer su labor
* El español Carlos Beristain dijo que los dos informes que presentaron contienen resultados de investigaciones que son elementos claves para evitar que puedan viciarse las pesquisas que desarrolla la PGR
Fernando Hernández
Después de asegurar que la desaparición forzada de los 43 normalistas, ocurrida en Iguala en septiembre de 2014, es un delito que no prescribe y que genera “un dolor permanente”, por lo que el caso seguirá abierto hasta que sea aclarado por las autoridades, los integrantes del Grupo Interdisciplinario de Expertos independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos pidieron a la sociedad guerrerense no dejar solos a los familiares de las víctimas.
Al acudir a la Normal de Ayotzinapa para despedirse de los familiares y compañeros de las víctimas, el español Carlos Beristain les recomendó que “lo importante es que mantengan su unidad, y que también sean acompañados por la propia sociedad civil, porque obviamente existen riesgos y necesitan del acompañamiento en este proceso”.
Indicó que se van agradecidos con México, tanto con su pueblo como con los padres de los 43 estudiantes, y se dijo esperanzado en que el trabajo que desarrollaron sea benéfico, no sólo para la sociedad, sino para el Estado mexicano en la investigación de los hechos de violencia que derivaron en la desaparición forzada de los 43 estudiantes.
A pregunta expresa, el doctor en psicología de origen español acusó que hubo falta voluntad política por parte de las autoridades mexicanas para permitirles hacer su labor y detalló que “hubo obstáculos que nos han impedido avanzar más de lo que nosotros quisiéramos, de los cuales se ha venido informando puntualmente a las autoridades. Para nosotros lo más importante es todo lo que está todavía por hacerse en torno al caso”.
Precisó que es muy difícil saber el porcentaje del avance que llevan las investigaciones que como GIEI desarrollaron, señaló que lo más importante es dar claridad respecto al caso.
Carlos Beristain precisó que lo verdaderamente importante no es dar a conocer cuántas diligencias se han hecho, cuántos peritajes pudieron haberse realizado, y seguir en esa danza de estadísticas, como lo ha hecho la PGR, sino qué tanto se ha avanzado en términos reales para encontrar la verdad sobre los hechos ocurridos en iguala.
Cuestionado sobre si existe algún instrumento jurídico internacional mediante el cual se pueda presionar al Estado Mexicano para que se les permita seguir en el país, recordó que el GIEI fue creado luego de las medidas cautelares que otorgó la CIDH y en ese sentido mencionó que en las medidas cautelares siguen activas.
Dijo que desconoce cómo quedará finalmente configurado el mecanismo de seguimiento a las investigaciones por parte de la CIDH, pero que es importante que opere de manera efectiva.
Subrayó que los dos informes que presentaron contienen resultados de investigaciones que son elementos claves para evitar que, en algún momento dado, puedan viciarse las pesquisas que desarrolla en su mayor parte la Subprocuraduría de Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República.
Detalló que en los dos informes hay muchas cosas que ya se han avanzado, además de muchas peticiones hechas a las autoridades y líneas de investigación que tienen que seguirse, para llegar a la verdad en este caso.
Reiteró que los que ocurrió a los 43 normalistas es “un caso de desaparición forzada”, por lo que no prescribe y eso obliga a “los Estados miembros de la OEA “a investigar y sancionar los casos por violaciones a los derechos humanos”.
“Estamos en este proceso y esto es lo que el gobierno tiene que hacer, el gobierno mexicano tiene que saber que un caso por desaparición forzada no se cierra. La desaparición forzada es un delito permanente, es un dolor permanente, y el caso va a seguir abierto hasta que se llegue a su esclarecimiento”.