De la Rosa: la cultura del premio en vez de castigo

 

Noé Mondragón

 

Como el cinismo en el PRD ya se tornó una nociva y pervertida costumbre, ahora hasta sus más “destacados” miembros la defienden como si se tratara de un valor y no de un vicio. El caso más reciente de esta oprobiosa situación, lo acaba de confirmar el coordinador de la fracción perredista en el Congreso local, Sebastián de la Rosa Peláez. Y es que, en su papel de pastor de los diputados locales de su partido, el oaxaqueño no pudo cabildear con éxito a fin de lograr una votación uniforme en diciembre pasado, en contra de la designación del priísta Xavier Olea Peláez, como fiscal del estado. Ahora no quiere asumir los costos políticos de esa forma atrofiada de entender y percibir los acuerdos. De los errores cometidos. Se lee así.

DE LA ROSA: MÁS FRACASOS.- El coordinador de los diputados locales perredistas se engalló. Literalmente, retó a la dirigencia nacional de ese partido, a sostener una reunión con el propósito de “definir las estrategias a seguir para fortalecer al partido, pero hasta hoy no ha respondido. Si la dirigencia nacional quiere mantener una relación de coordinación, tendrá que aceptar esa reunión”. Es decir, imprudentemente, Sebastián se puso por encima de sus propios jerarcas partidistas. Y de ahí se abren las lecturas: 1.- El diputado local de la Rosa Peláez, no está acostumbrado a recibir castigo por sus malas acciones y decisiones, sino premio. Así le ha funcionado siempre. El caso más reciente: cuando fue investido como diputado local plurinominal, después de haber apoyado abiertamenteantes y después— al ex edil de Iguala y actual presidiario del penal del Altiplano, José Luis Abarca Velázquez. Sin recato ni pudor alguno, Sebastián de la Rosa fue de los que presionó al interior de las tribus perredistas para obtener el premio de la diputación local, cuando lo conducente era castigo. Así como le ocurrió al ex perredista Lázaro Mazón Alonso. 2.- Pese a que “la línea” de la dirigencia nacional del PRD se enfocó en todo momento a que sus diputados locales votaran en contra de la propuesta que encumbró a Xavier Olea Peláez, como titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), los diputados Carlos y Crescencio Reyes Torres, Rosa Coral Mendoza Falcón, Erika Alcaraz Sosa, Eloísa Hernández Valle, Raymundo García Gutiérrez y Silvia Romero Suárez, votaron a favor. Es decir, la mitad de ellos. Ese hecho se convirtió en el primer fracaso político de Sebastián de la Rosa, en su incipiente papel como coordinador de fracción perredista. Porque no pudo sacar un voto uniforme. 3.- Cuando desde la dirigencia nacional del PRD a través de la Comisión de Vigilancia y Ética Parlamentaria, se acordó citar a esos siete legisladores locales a fin de aplicarles algún tipo de sanción por la orientación de su voto, De la Rosa Peláez, puso el grito en el cielo. Adujo que era un tema ya rebasado, pues hacia dos meses que se había votado por el fiscal. También lo calificó como “un desacierto e imprudencia de la dirigencia nacional, citarlos para ser reconvenidos”. El escenario político perfecto para él, es que las cosas se queden ahí. Y que los legisladores locales “por él dirigidos, sigan votando sin la presión política del CEN del PRD. Es decir, sin reglas, línea ni respeto a los estatutos partidistas. Porque además, él no quiere castigo, sino premio. A eso lo acostumbraron todas las tribus perredistas. Y por eso ahora, se engalló.

HOJEADAS DE PÁGINAS…Los recortes al presupuesto por parte de la Secretaría de Hacienda, le van a pegar con dureza a los sectores laborales más vulnerables. Destacan entre estos, los burócratas y maestros. No tardará mucho antes de que comiencen a operar los despidos masivos. Con ello, el sexenio priísta de Enrique Peña Nieto, pasará como uno de los más nefastos en la historia, para todos los mexicanos.