* Grave error de los médicos del Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense; la mujer se encuentra en terapia intensiva

 

Una mujer se encuentra en terapia intensiva en el Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense, en esta ciudad capital, luchando por sobrevivir, luego de haber sido víctima de una brutal negligencia médica por parte de los galenos del mencionado nosocomio, quienes tras practicarle una cesárea dejaron en su vientre material quirúrgico, lo que le ocasionó graves complicaciones de salud.

A las oficinas de esta redacción se presentaron los familiares de Herminda Carbajal Cleofas, de 33 años de edad, originaria de Omitlán, quien tiene domicilio conocido en la comunidad de La Palma, municipio de Juan R. Escudero, para denunciar el severo caso de negligencia por parte de los doctores del Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense.

Familiares de la joven acusan que el pasado mes de julio en la clínica ya citada le practicaron a ésta una cesárea. La mujer dio a luz a una niña, y tras permanecer tres días internada, los doctores la dieron de alta.

Hasta ahí todo bien, sin embargo con el paso de los días, Herminda Carbajal seguía sintiendo fuertes dolores que en un comienzo se confundieron con los síntomas normales de la cesárea.

Sin embargo, como los dolores no cesaban, al contrario, se intensificaban, acudieron a un médico particular de Tierra Colorada, quien calificó como atípico su estado, por lo que ordenó que se realizara algunos estudios.

Un ultrasonido confirmó días después la existencia de un objeto, un posible “textiloma”.

Cabe aclarar que un textiloma es el término acuñado para describir una masa compuesta por una matriz de algodón que es olvidado en una cavidad, posterior a una intervención quirúrgica. En pocas palabras el término “textiloma” se refiere a un cuerpo de tela dejado involuntariamente en el paciente durante la cirugía y a las reacciones secundarias que perpetúan su presencia en el cuerpo. Es decir que los médicos que practicaron la cesárea olvidaron dentro de ella algún algodón  o gasa, lo que le ocasionaba a la mujer los fuertes dolores.

Al enterarse de esto, los familiares trasladaron a la fémina al hospital donde había sido operada de la cesárea, el de la Madre y el Niño Guerrerense.

Cabe mencionar que de acuerdo con el testimonio de los familiares, los doctores que la atendieron aceptaron que dentro de ella había un objeto no común, y no descartaron la negligencia, pero no han dado a conocer los nombres de los responsables de la operación, por lo que dicha irregularidad podría quedar impune.

El estado de salud que guarda Herminda es aún delicado, pese a que ya fue intervenida quirúrgicamente en el citado hospital para extraerle el objeto en cuestión, pues la fémina se encontraba, hasta el cierre de esta edición, en terapia intensiva, y a decir de sus familiares la atención que recibía dejaba mucho qué desear, toda vez que la culpa de que se encuentre en ese estado es totalmente de los médicos.

Cabe mencionar que la administración del Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense no se ha hecho responsables del pago de los medicamentos que Herminda ha necesitado durante su convalecencia, e incluso, los familiares de la víctima presentaron ante este medio las diversas recetas y los estudios clínicos que han tenido que pagar por cuenta propia con la esperanza de que su consanguínea recupere lo más pronto posible su salud.

A pesar de que los familiares, aseguran, sólo desean que Herminda se recupere, exigen a las autoridades de Salud correspondientes tomar cartas en el asunto y sancionar severamente a los responsables de esta negligencia con la finalidad de que casos como este no se vuelvan a repetir.