* El titular de la Sagadegro informó que el criterio de la aseguradora es que la producción de maíz esté afectada a más del 50 por ciento

 

REDACCIÓN

 

El seguro agrícola catastrófico solamente indemnizará 18 mil hectáreas de maíz afectadas por la sequía, apenas el 10 por ciento del total de plantaciones siniestradas.

El titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural de Guerrero (Sagadegro), Juan José Castro Justo, informó que a la fecha hay más de 172 mil hectáreas de maíz con reportes de siniestro.

Sin embargo, la aseguradora Mapfre determinó que únicamente indemnizará 18 mil hectáreas, apenas el 10.4 por ciento.

Dijo que la aseguradora tomó esta determinación después de inspeccionar las plantaciones de maíz afectadas por la falta de lluvias, y explicó que el criterio de Mapfre para el pago de la indemnización es que la producción de maíz esté afectada a más del 50 por ciento.

“A nuestro juicio la afectación es mayor (…), las reglas que tiene la asegura son muy ventajosas para ellos en las condiciones que se dio el temporal en Guerrero”, lamentó Castro Justo.

Indicó que por ahora la Sagadegro está presionando para que la aseguradora Mapfre acelere el pago de las 18 mil hectáreas de maíz, por un monto de mil 500 pesos por hectárea.

La dependencia también está solicitando que se hagan nuevas revisiones a las plantaciones de maíz afectadas, para que se pague un mayor número de hectáreas siniestradas.

Castro Justo informó que la Sagadegro ha gestionado algunos apoyos para los campesinos afectados que no fueron considerados por la aseguradora Mapfre. Sin embargo, reconoció que “será muy difícil lograr un apoyo generalizado para todos los productores afectados”.

El secretario al advirtió que debido a la sequía hay una disminución importante en la producción de grano básico. Puntualizó que en 2014 el estado de Guerrero produjo alrededor de un millón 500 mil toneladas de maíz y que este año se espera que la cifra sea mucho menor.

A pesar de esta situación, aseguró que no habrá escasez y que “el abasto rural está garantizado”; no obstante, en lo que sí afectará, dijo, es que no habrá venta de excedente a otras entidades, como Morelos y el Estado de México. Además, disminuirá el ingreso de las familias campesinas e impactará en el autoconsumo.