Diciembre fiestero

 

Felipe Victoria

 

¿A usted cómo le fue durante este convulso 2015 en Guerrero? Mejor ni lo diga, porque de antemano sabemos que no tan bien como lo hubiera querido y que por gracia divina lo está terminando.

Si de alguna manera pertenece a la burocracia estatal o municipal, en las casas de empeño se miran los resultados, están haciendo su agosto prestando miserias sobre avalúos gandayas que son un insulto a la dignidad, pero bien dicen que la necesidad tiene cara de hereje

Cuando a todos les va mal, a los agiotistas y prestamistas les va requete bien, ¿pero qué le vamos a hacer?

No alcanzamos a explicarnos por qué el fenomenal rebote de los desaciertos de un solo personaje, que ni idea tuvo de gobernar para el bienestar común, sino apenitas para su cuatitud académica que premió para que se atascaran ahora que hubo lodo con dobles chambas y se fueron locos de contentos con su cargamento, y hasta sin residencia oficial en Chilpancingo dejaron al gobernador.

Pareciera oportuno echar abajo aquel arrebato socialista de una mujer y comenzar a recuperar cierto orden en las cosas, al cabo no se llevaron los ladrillos ni las losas de la gran casona de Los Eucaliptos, junto al conjunto Jacarandas.

Ensoberbecidos, presumiendo el poderío económico de los amantes de la charrería y los hermosos caballos finos que lucieron en la Costera Alemán como su festejote, acaudillados por el rector.

Para mis adentros comparé cuantos émulos y admiradores de El Chapo Guzmán se lucieron el sábado pasado; me asalta la duda de si el flamante alcalde Evodio Velázquez Aguirre, de buena gana autorizó el evento incómodo para los hoteleros y habitantes porteños.

¿Por qué el miedo al funcionario del plan con maña que le falló para haber sido candidato independiente a la gubernatura si lograban impedir y anular las elecciones de junio pasado?

Claro, si con unas docenas de golfos reprobados en exámenes de admisión a la UAGro nos ponen de cabeza la zona de la glorieta de La Diana, imaginemos si la Rectoría manipulara a los ochenta mil universitarios para tomar las calles y hacer bronca. Ha de ser por eso el miedo y el disimulo para auditar en qué se le fugaron tantos recursos a la casa máxima ¿de estudios? en Guerrero.

En fin, parece que de la asomadita que se dio Evodio Velázquez al cochinero de mercachifles en que está convertido el zocalito frente a la Catedral, como que se le ocurrió intentar poner orden, algo muy parecido a una misión imposible.

Lo simpático va a ser estos días cuando miles de peregrinos guadalupanos se vean obstaculizados para poder entrar al templo, hasta me acuerdo de lo que cuentan los evangelios de Jesús sacando a latigazos a los mercaderes.

No todos los disimulos y negligencias oficiales pueden disfrazarse de “tolerancia democrática” a situaciones evidentemente anómalas, como la invasión de espacios públicos por organizaciones de comerciantes informales, protegidas por los líderes magisteriales y de alguno de tantos cartelitos que se disputan Acapulco. De tantos invasores ni su voto sirvió a ningún partido porque resulta que son de fuera.

Pero en fin, ya sabrán si se ponen las pilas y comienzan a gobernar  de veras, o se entretienen en vistosos foritos lucidores que luego sirven para lo que se unta al queso.

Como sea, para la temporada de fin de año tienen segura la llegada en marabunta del turismo nacional a la gala de luces pirotécnicas.

En Chilpancingo lo histórico y tradicional es el Paseo del Pendón y la Feria de Navidad, que anima y reúne a todos, solo hay que ser mesurados en la ingesta de mezcal para que no se caldeen los ánimos y confundan tigres con jaguares.

-¡Tilín, tilín!- Suena la campanita escolar.

-Maestra Pizarrina, ¿se irá de fin de año a ver la pirotecnia en Acapulco?

-Yo me quedo en mi Chilpancingo adorado con nuestras fiestas tan tradicionales llenas de folclor y color

-Sáquenos de una duda Teacher, ¿por qué aquí se disfrazan de jaguares con motitas negras sobre amarillo, pero les dicen tigres, que son rayados?

-Me la pusieron dura y pelona chamacos; es una costumbre debida a la indiorancia zoológica ancestral. Felinos peligrosos hay de varias especies como pumas, panteras, leopardos, leones y por supuesto los tigres rayados, y nuestros emblemáticos jaguares representados hasta en el escudo que diseñó Diego Rivera para el estado de Guerrero el siglo pasado.

-Oiga maestra de los escogidos por los diputados para que el Gobernador Héctor Astudillo les indique una terna de donde decidan quién será el nuevo fiscal, ¿sabía que sí hay una mujer apuntada y con buenas posibilidades?

-Claro chamacos, Blanca María del Rocío Estrada Ortega supera en preparación académica y en la praxis del Ministerio Público a los competidores, que por haber sido litigantes fueron cómplices de la corrupción de que reniegan, pero ya veremos.

-Uriel Fernández Peláez hizo campaña como si fuera una diputación o alcaldía lo que está en juego y a Javier Olea Peláez le tienen mucha tirria y envidia por famoso en casos nacionales, ¿pero Erit Montúfar?

-Ese va para jefaturar la Policía Investigadora chamacos.