Temas cotidianos

 

Por Félix J. López Romero

 

Deben encarcelarse a normalistas rijosos; solo así habrá paz

 

La desaparición forzada de 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, ha sido utilizada como bandera para que sus compañeros cometan actos delictivos como son el secuestro de autobuses, el saqueo de tiendas departamentales y muchas cosas más, creyendo torpemente que dañando a la sociedad, aparecerán  muertos quienes han llevado a cabo tareas sobre el particular.

Dados a la beligerancia, los estudiantes han continuado en su tarea para que esta entidad siga viviendo en la anarquía, como se ha visto ocurre. Para continuar con sus actos de desestabilización un grupo de jóvenes de la normal de Ayotzinapa, secuestraron cuatro camiones de pasajeros, haciendo descender a quienes viajaban en ellos; además un camión cisterna que conducía gasolina.

Enterados de lo ocurrido policías antimotines federales y del estado, acudieron a la detención de los pillastes, con quienes se enfrentaron en el nuevo libramiento a Tixtla, resultando numerosos heridos de ambas partes, siendo detenidos 13 normalistas, quienes al poco fueron puestos en libertad, a solicitud de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, quien intercedió por ellos; algunos que resultaron lesionados se

les hospitalizó, aun cuando sus heridas fueron leves.

Si se continúa con la condenable práctica, de poner en libertad a presuntos delincuentes, será difícil lograr la paz, porque deben castigarlos por sus actitudes criminales; llevados ante la autoridad, será la que determinará lo conducente.

El que la hace la paga, dice una sentencia popular. Lo hecho por los estudiantes, que por lo que se ve no estudian, es un acto irreflexible que debe ser castigados, porque no se vive la ley del monte.

Sobre la violencia el gobernador Héctor Astudillo Flores, manifestó estar consciente de la situación angustiosa que se vive, comprometiéndose al logro de la paz por todos reclamada.