ACAPULCO.— El alcalde Evodio Velázquez encabezó eventos protocolarios junto a los embajadores de Filipinas e Indonesia para celebrar los 450 años del Tornaviaje del Galeón de Manila.

Este jueves en la plaza México-Filipinas del Museo Histórico Fuerte de San Diego, Velázquez Aguirre dio la bienvenida a los representantes diplomáticos de las naciones orientales, ante quienes destacó el inicio de la construcción del nuevo Acapulco, que retoma su historia como el punto de partida de la cultura económica de América con el tornaviaje del Galeón de Manila y que se moderniza para ser competitivo en el contexto actual del sector turístico.

“Para nosotros es muy importante que ustedes señores diplomáticos, funcionarios, empresarios, académicos, se lleven hoy el mensaje de los acapulqueños, que estamos trabajando para sin lugar a dudas seguir siendo competitivos con todos los destinos turísticos del mundo, somos una ciudad hermosa, una ciudad que tiene no solamente gran presencia natural, sino también tiene gente buena, gente cálida, gente amable, gente profesional, gente que queremos hoy, paz, armonía, desarrollo, queremos motivar y mover el corazón y la mente de la gente para que juntos vayamos a hacer que hoy Acapulco siga brillando como debe de brillar en todo el mundo”, expresó el primer edil.

Subrayó que al conmemorarse 450 años de la ruta que descubrió Andrés de Urdaneta a través de Acapulco, su gobierno trabaja con el apoyo de la sociedad, para fortalecer ese camino que más allá de las fronteras mantiene el puerto.

El embajador de Filipinas en México, Catalino Dilem agradeció al gobierno del alcalde Evodio Velázquez la conmemoración del Día Internacional del Galeón de Manila, refrendando su amor por Acapulco, ciudad hermana de Manila.

Enseguida, el alcalde junto a los embajadores de Filipinas, Catalino Dilem y de Indonesia, Yusra Khan, develaron los bustos de Andrés de Urdaneta y el samurái Hasekura Tsunenaga, personajes clave en la historia de Acapulco, al contribuir en la unión comercial y cultural de oriente y occidente; además de colocar una ofrenda floral y montar una guardia de honor.