Durante la jornada informativa realizada a través de diferentes radiodifusoras y como parte de las actividades en el marco del onceavo aniversario de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, padres y madres de familia, reiteraron que el acceso a los archivos del Ejército, la extradición de Tomás Zerón de Lucio y la investigación de la telefonía celular son claves para conocer la verdad y dar con el paradero de los jóvenes.
El abogado de las familias, Isidoro Vicario Aguilar, recordó que las investigaciones quedaron detenidas cuando fueron señalados elementos del Ejército Mexicano, y que tras la destitución de Omar Gómez Trejo como titular de la Unidad Especial de Investigación, el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador también removió a todo el equipo.
Denunció que desde esa fecha, la Unidad se mantiene sin titular, lo que ha paralizado los avances del caso.
Expuso que en la última reunión que sostuvieron con la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, se les prometió reforzar la línea de investigación que apunta a los teléfonos de los estudiantes que permanecieron activos después de los hechos de Iguala, sin embargo, los padres advirtieron que las investigaciones continúan sin dar resultados concretos.
Por su parte, Mario González, padre de uno de los normalistas desaparecidos, reprochó que cada cierto tiempo llegan nuevas autoridades a “revisar el expediente” sin que se llame a declarar a quienes estuvieron directamente involucrados.
Indicó que Tomás Zerón es pieza clave para esclarecer cómo se fabricó la llamada “Verdad Histórica”, por lo que exigió su extradición inmediata.
Finalmente, padres, madres y normalistas reclamaron al Gobierno Federal un alto a la simulación y denunciaron que continúa la protección al Ejército, al que señalan como parte central en la desaparición de los jóvenes.
