Alejandro Gómez
Representantes de la Junta de Conservación y Vigilancia de Taxco (JCyVT) nombraron por acuerdo unánime al ex presidente municipal y defensor del patrimonio histórico de la ciudad, Mario Flores Pérez, integrante de la “Comisión de Honor y Justicia” de ese organismo ciudadano, el cual estará acompañado de otros profesionistas para cuidar el entorno arquitectónico y hacer cumplir la ley 685 de conservación y vigilancia aprobada por el Congreso de Guerrero hace algunos años.
Fue el actual presidente de esa agrupación civil, Fortunato Gómez García, el encargado de tomarle la protesta de ley al decano de los arquitectos en la entidad guerrerense, cuya trayectoria profesional ha estado enmarcada en una serie de proyectos, acciones, así como en la fundación de la comisión de “Director Responsable de Obra” (DRO), de la Comisión de Arquitectos Responsables de Obra y Co-rresponsables de Taxco (Cadroc) y aportaciones para fortalecer el gremio en Guerrero.
Durante una sesión ordinaria donde estuvieron presentes integrantes y ex presidentes de la JCyVT, Flores Pérez que tiene más de 50 años ejerciendo la profesión de la arquitectura e hizo posible la creación del “Colegio de Arquitectos de Taxco”, asumió el compromiso de ser un activo constante al interior de la comisión de honor y justicia del organismo para observar el cuidado del estilo colonial del “Pueblo Mágico” y aplicar la ley en la materia cuando lo determinen las circunstancias.
El también creador del primer plano regulador de la ciudad en 1965, que fue aprobado por el poder legislativo del estado y contemplaba la construcción de un libramiento carretero que se consolidó en el sexenio 1999-2005 del extinto gobernador, René Juárez Cisneros, se dijo agradecido por la distin-ción y dejó en claro que la JCyVT es una agrupación autónoma, apartidista y no debe estar en manos de ningún partido político.
Anticipó que la comisión de honor y justicia y la misma JCyVT harán uso de sus facultades avaladas por la ley 685 de conservación y vigilancia e incluso pedirán la intervención de la fuerza pública, para que se respete el estilo arquitectónico novohispano de Taxco, se conserve el entorno colonial del des-tino y no estar avalando otro tipo de situaciones o elementos contrarios a la esencia del “pueblito y chiquito que tanto presumió Rafúl Kráyem”.
El ex alcalde Mario Flores Pérez que es el autor del libro “100 obras en la Ciudad de Taxco”, insistió en que ese organismo público debe marcar una ruta concreta y lineamientos claros para que la ley 685 de conservación y vigilancia sea respetada por todos los habitantes del municipio y en ese senti-do, pidió a los demás integrantes de esa comisión asumir su compromiso firme con el cuidado de la ciudad platera y defiendan el patrimonio histórico.
Hizo el llamado a sus homólogos a privilegiar su responsabilidad con la profesión, desarrollando una labor apegada a principios éticos, enfocando su visión hacia la preservación del entorno arquitectóni-co y defender la herencia de los antepasados, en el ánimo de que los constantes cambios no sean causales de deterioro, destrucción, modificación o imposición de situaciones ajenas.
En el evento también rindieron protesta como integrantes de la citada comisión el cronista de Taxco, Wilfrido Martínez Loza; los ex presidentes del organismo, Rafael Meléndez Gómez y Manuel Juárez Mondragón, el arquitecto Víctor Sierra Navarro y representantes del Grupo Unidos por Taxco.