En disputa por el uso de un predio, un conato de violencia se generó entre dos grupos de comerciantes: unos que venden en el tianguis aledaño al mercado Baltazar R. Leyva Mancilla y otros liderados por el empresario y político Pioquinto Damián Huato quienes venden en el centro de la capital y zonas aledañas.
El conflicto comenzó aproximadamente a las 14:00 horas en un predio ubicado en la parte trasera del mercado Baltazar R. Leyva Mancilla, el cual era la antigua la central camionera en la capital, en la colonia Caminos.
Según declaraciones de los comerciantes semifijos del tianguis, el político y empresario llegó acompañado de personas cubiertas del rostro con cubrebocas y vestidos de negro, para desalojarlos de manera violenta.
Los acompañantes de Pioquinto prendieron fuego a algunas cosas que se encontraban en el predio en disputa y, según los comerciantes del tianguis, amenazaron con incendiar los locales informales y vehículos del lugar.
En ese momento, en la zona salió a relucir una bomba molotov junto a una garrafa presuntamente llena de gasolina y algunos garrafones quemados, aunque los comerciantes seguidores de Pioquinto negaron que eso fuera de su propiedad.
Por su parte, Pioquinto Damián Huato aseguró ser dueño del terreno y señaló que quiere desalojar el lugar de los que se rehusan a pagar por el espacio, a lo que los comerciantes alegaron que les ha aumentado la renta de manera injusta.
La discusión se prolongó hasta pasando las 18:00 horas, con conatos de violencia constantes por lo que llegaron elementos de la Guardia Nacional y Policía Estatal, Ministerial y Municipal, para mantener la paz entre ambos bandos.
Por un momento, los comerciantes impidieron la salida de Damián Huato del lugar, hasta que comprobara con escritura la propiedad que durante años les ha cobrado una renta y se desató una nueva discusión.
Autoridades del Gobierno del Estado, del Ayuntamiento de Chilpancingo y de la Fiscalía General del Estado (FGE) se presentaron en el lugar, dialogaron con ambos contingentes hasta que lograron disipar la tensión y que ambos grupos se fueran del lugar.