Desde las primeras horas de este martes, pobladores de comunidades afectadas por el huracán “Erick” iniciaron un bloqueo total en la carretera federal Acapulco–Pinotepa Nacional, a la altura del puente de Marquelia, en exigencia de ayuda urgente por parte del gobierno.
La protesta fue convocada desde hace unos días por integrantes del Concejo Indígena y Popular de Guerrero–Emiliano Zapata (CIPOG-EZ), quienes acusaron abandono por parte de los tres niveles de gobierno, pese a las graves afectaciones que dejó el fenómeno meteorológico en regiones de la Montaña y la Costa Chica.
Desde las 6:00 de la mañana, los manifestantes cerraron el paso vehicular con piedras, troncos, lonas y automóviles, generando una gran fila de vehículos varados.
De acuerdo al CIPOG-EZ, más de 26 mil viviendas sufrieron daños, con techos arrancados, paredes agrietadas y pérdidas totales de pertenencias como colchones, muebles y aparatos electrodomésticos.
A esto se suman caminos destruidos, escuelas colapsadas, centros de salud abandonados y comunidades enteras sin energía eléctrica, agua potable ni señal telefónica.
Así como también, los campesinos denunciaron severas pérdidas en sus cultivos de maíz, mango, papaya, coco, plátano, limón y sandía.
Los manifestantes, denunciaron que la ayuda oficial únicamente se ha concentrado en zonas urbanas, mientras localidades rurales como San Luis Acatlán y Marquelia siguen sin recibir ni un censo de daños.
Por lo tanto, exigieron una respuesta inmediata por parte de la gobernadora del estado, Evelyn Salgado Pineda y de la presidenta de la república, Claudia Sheinbaum Pardo y de esta manera, poder recibir los apoyos necesarios para sus comunidades.
