Una obra de pavimentación ejecutada con recursos del gobierno del estado fue reportada como realizada por el Ayuntamiento de Chilpancingo durante la administración de la exalcaldesa Norma Otilia Hernández Martinez, lo que se podría tratar de una posible simulación de obra pública y malversación de recursos.
La obra en cuestión se localiza en la calle Benito Juárez de la colonia 21 de Marzo, donde vecinos gestionaron directamente ante el gobierno estatal la pavimentación con concreto hidráulico.
A lo cual, la respuesta por parte del gobierno estatal fue positiva e incluso la propia gobernadora encabezó el arranque de los trabajos.
A pesar de ello, funcionarios municipales intentaron atribuirse la obra desde su inicio, afirmando que era una decisión de la entonces alcaldesa.
Por su parte, los vecinos rechazaron esta versión y aclararon que se trataba de una gestión estatal, sin participación del municipio.
Los colonos, afirmaron que durante las distintas fases de la obra, los funcionarios municipales acudieron en varias ocasiones para tratar de justificar su intervención, ofreciendo supuestos “complementos” a los trabajos, pero que nunca se concretaron.
Ahora, con una revisión física a las obras heredadas por la administración de Gustavo Alarcón Herrera reveló que el gobierno de Norma Otilia reportó la obra como concluida, en tiempo y forma, como si se hubiera realizado con presupuesto municipal.
Una fuente cercana al ayuntamiento, reveló que es una irregularidad evidente, destinando recursos que no fueron utilizados en esa obra, y aun así la reportaron como ejecutada.
Cabe señalar que tras el rechazo vecinal a la supuesta intervención municipal, una constructora vinculada con la administración pasada, regresó para pavimentar un callejón aledaño sin explicar el motivo.
La actual administración ha informado que recibió 860 expedientes de obra, de los cuales al menos 700 presentan irregularidades, y 20 han sido identificados como “obras fantasma”, es decir, proyectos pagados en su totalidad pero que no existen físicamente.
Como también es el caso de la colonia Universal, en donde empresas intentaron iniciar obras de forma extemporánea para justificar el recurso ejercido, aunque legalmente ya incumplieron los plazos establecidos en los contratos.