El secretario de Seguridad Pública Federal, Omar García Harfuch informó de la detención en el Estado de México de un presunto operador del grupo criminal Guerreros Unidos (GU), Alejandro”El Cholo” Benítez Palacios a quien se le relaciona con los delitos de secuestro, homicidio y extorsión en nuestra entidad y de estar implicado en la desaparición de 43 normalistas.
Así lo informó García Harfuch a través de su cuenta de X, en dónde explicó que está detención se logró “gracias a labores de investigación” en una acción conjunta entre la Secretaría de la Defensa Nacional, Secretaría de Marina, la Fiscalía General de la República, la Guardia Nacional y Seguridad Pública Federal.
Explicó que en un operativo en conjunto de esas instituciones en el Estado de México se logró la detención de Alejandro “N”, quien afirmó es integrante del grupo delictivo Guerreros Unidos.
Señalo que a Alejandro “N” se le relaciona con los delitos de secuestro, homicidio y extorsión en el estado de Guerrero.
Al grupo criminal GU se le responsabiliza de la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa en Iguala en septiembre del 2014, por órdenes del entonces alcalde perredista, José Luis Abarca Velázquez con quién mantenían una red de complicidades para la operación impune de ese grupo del crimen organizado dedicado al trasiego de heroína hacia los Estados Unidos.
A Alejandro “El Cholo” Benítez Palacios se le detuvo en el municipio de Tlatlaya, en el Estado de México que se encuentra muy cerca de los límites de la Tierra Caliente de Guerrero y esa entidad, en donde se presume opera el grupo criminal la Familia Michoacana.
Se conoce que “El Cholo” fue jefe de plaza de GU en los municipios de Taxco, Huitzuco y Tepecoacuilco y jugó un papel importante en el operativo que implementaron junto con policías municipales la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre del 2014 en Iguala cuando desaparecieron a 43 estudiantes de Ayotzinapa.
La detención de este operador de GU es la primera que se realiza en el gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo en torno al caso Ayotzinapa que cumplió 10 años el pasado mes de septiembre y en el cual la presidenta se ha comprometido a resolverlo.