Alejandro Gómez
Cerca de 300 habitantes, comisarios, presidentes de bienes comunales y representantes de unas 50 localidades rurales de Taxco, protestaron a las afueras del hospital general IMSS-Bienestar “Adolfo Prieto” de la ciudad para denunciar que personal médico de la institución les han negado la atención clínica, les cobran servicios que por ley deben ser gratuitos y los obligan a acudir a farmacias particulares para comprar sus medicamentos, debido a la inexistencia de insumos básicos.
“Todo esto es una injusticia y no puede seguir así, pues los usuarios deben llegar al hospital de Taxco casi agonizando para ser atendidos y a la mayoría de gente les niegan el servicio médico”, dijeron los inconformes, al reclamar que familias enteras de las comunidades han tenido la necesidad de vender sus viviendas y animales de granja para pagar consultas médicas particulares, comprar sus medicinas y de esa manera poder salvar sus vidas, ante el desinterés del sector salud.
Los quejosos mostraron testimonios de personas a quienes les negaron atención médica en el nosocomio y casos donde sin justificación alguna les reprogramaron sus citas clínicas, por lo que se han trasladado a hospitales de Puente de Ixtla, Morelos, para atenderse de padecimientos y urgencias como piquetes de alacrán, debido a que en Taxco son ignorados por directivos, médicos y enfermeras.
Evidenciaron que muchas personas de localidades más alejadas del municipio como “San José Potrero”, “La Presa” o “Totoapa” llegan al hospital “Adolfo Prieto”, desde las cinco de la mañana a solicitar atención, pero son rechazadas por el personal de salud y regresan a sus lugares de origen sin ser revisados clínicamente y con el riesgo de que sus malestares puedan agravarse, aunado al desembolso de hasta seis mil pesos para comprar antídoto aplicable por mordedura de serpiente.
Acusaron que tanto en el hospital general como en los más de 25 centros de salud distribuidos en el municipio no existe siquiera lo básico como paracetamol, mientras médicos y enfermeras asignados a las comunidades se quedan mirando únicamente por el desabasto de medicinas en sus áreas de trabajo, además de que otros profesionistas “no quieren enlodarse” los zapatos en la zona rural porque no entienden el sufrimiento de la gente por la falta de servicio clínico.
“Ya estuvo suave de tanto agravio a la gente, esto no es posible, debe atenderse y corregirse”, dijeron los manifestantes, al considerar irónico la existencia de centros y casas de salud en las comunidades con sus respectivas claves pero que no funcionan por la falta de medicamentos, donde las familias de enfermos piden dinero prestado para contratar médicos particulares, aún y cuando el presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha ordenado otorgar esos servicios pero no se cumple.
Exigieron un trato igualitario en el tema de salud pública y no etiquetar a los pueblos de Taxco como “gente de primera y de segunda”, en virtud de que la Carta Magna aplica la generalidad de mexicanos para todos los habitantes.