El Centro de Derechos Humanos de la Montaña “Tlachinollan” demandó a la Fiscalía General del Estado (FGE) que no deje en impunidad los asesinatos que se han perpetrado en Tlapa de mayo a la fecha y que podrían estar relacionados con la operación de la policía comunitaria en la comunidad indígena de El Otate.

Este miércoles el director de ese Centro, Abel Barrera Hernández recordó que el sin de semana se perpetró un ataque armado a tres personas (dos hombres y una mujer) que viajaban en un vehículo en el centro de Tlapa.

Los dos hombres perecieron cuando llegaron al Hospital General para recibir atención médica y fueron identificados como Jonathan Basurto Solano y otro hombre de nombre Rey, quienes fueron identificados como trabajadores de una empresa que distribuye gas en la región.

Barrera Hernández explicó que este fin de semana pasado “hubo dos homicidios, dos habitantes de la comunidad del Otate, municipio de Tlapa, uno de ellos era policía comunitario”.

Señaló que a ese centro “nos preocupa mucho que continúen esos asesinatos y esto ocurrió en el primer cuadro de la ciudad, personas que viajaban en una motocicleta les dispararon a quemarropa y mató a las dos personas”.

Recordó que el pasado 20 de mayo “asesinaron al comandante de la policía comunitaria del Otate, el compañero Josefino Tapia, él iba por la mañana a darle de comer a sus vacas a su terreno río debajo de donde tiene su vivienda y bueno ya lo esperaban gentes armadas en un vehículo, una vez que el comandante entró a una calle cerrada, lo balacearon, fueron muchos balazos los que le dieron, más de 20 balazos le dispararon y terminaron con su vida”.

Señaló que a la fecha la familia y ellos como Centro que están acompañando a las víctimas, “no sabemos a la fecha qué investigaciones hay de la FGE, su familia está muy temerosa que los asesinatos sigan y bueno es muy importante que la Fiscalía General del Estado investigue esos asesinatos del sábado pasado y que no sabemos cuál es el móvil”.

Abel Barrera indicó que “lo que provocan esos hechos es que la gente viva con temor y que estén a la deriva, indefensos y que las autoridades no implementen operativos de cuidado, de atención, de brindar seguridad, es algo muy grave no queremos que se vaya a reproducir la violencia como en Acapulco, que haya asesinatos, que no se haga justicia se propicie la impunidad y las familias de la Montaña no vivan en paz”, agregó.