Jorge Martínez
Antes del amanecer del sábado las llamas alcanzaban una altura considerable y tardó horas en que los bomberos pudieran sofocar el fuego.
Algunos ciudadanos abandonaron la zona para ponerse a salvo y por el miedo a que la gasera estallara.
Afortunadamente solo hubo daños materiales y no heridos ni pérdidas humanas. ANG