En una muestra de descontento y desaprobación hacia su dirigente estatal, Julián López Galeana, militantes y simpatizantes de Movimiento Ciudadano (MC) en Guerrero han expresado su intención de deslindarse del partido o de abstenerse de participar en el proceso electoral de 2024 si él continúa en su cargo.

La coordinación nacional de Movimiento Ciudadano no ha emitido la convocatoria para renovar la dirigencia estatal, lo que llevó a la designación de López Galeana como dirigente provisional, un hecho que no fue bien recibido por varios miembros del partido en Guerrero.

Felícitas Muñiz Gómez, dos veces presidenta municipal de Mártir de Cuilapan, señaló que tenía aspiraciones para la dirigencia estatal, pero al no emitirse la convocatoria, sus planes se vieron frustrados.

Ramiro Solorio Almazán, exregidor de Acapulco, acusó a Dante Delgado de estar bajo la influencia de Morena y de imponer a Julián López Galeana, a quien señala de llevar una política desestabilizadora y de revanchismo.

Noé Carachure Giles, excoordinador de MC en Chilpancingo, expresó que Julián López ejerce una política centralista y de retroceso dentro del partido.

Nereida de Jesús Silvano, exdelegada de Mujeres de MC, denunció discriminación y violencia política de género por parte del líder estatal, lo que la llevó a presentar una queja ante la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Guerrero.

Además, se ha reportado que el dirigente estatal despidió a nueve trabajadores, uno de ellos con 18 años de antigüedad en MC. Estos despidos han generado procesos legales ante la Junta de Conciliación y Arbitraje.

Este descontento interno plantea desafíos para la cohesión y unidad del partido de cara a futuros procesos electorales en el estado de Guerrero.