Josefina Aguilar 

Empresarios anunciaron que clausurarán dependencias gubernamentales debido a la falta de atención y respuesta a sus demandas, y porque sus titulares mantienen puertas cerradas a la ciudadanía.

En conferencia de prensa, los representantes de diversas organizaciones empresariales explicaron que el próximo martes 26 de septiembre cerrarán las oficinas del Instituto Guerrerense para la Infraestructura Educativa (IGIFE).

Omar Elías Azar y José Antonio Rodríguez, presidente y secretario de asuntos religiosos del Consejo Coordinador Empresarial (CEE),respectivamente; Germán Téllez Santos, presidente de Seguridad del Grupo Chilpo; Arturo Flores Mercado, presidente de joyeros del estado; Jorge Arturo Díaz Rendón, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA), y Diana Jiménez asesora Jurídica, reprocharon que funcionarios del gobierno del estado mantienen puertas cerradas en sus oficinas.

Elías Azar comentó que en estas dos últimas semanas, líderes de distintas organizaciones de la sociedad civil se han reunido para compartir su sentir respecto al desempeño de varios funcionarios de la administración estatal, porque “nos han demostrado su desdén, su desatención, insensibilidad cuando nos hemos querido acercar a esta administración y en respuesta no somos vistos ni escuchados, mucho menos han resuelto nuestros planteamientos y problemas. Para ellos somos solamente fantasmas”, reclamó.

Ante lo que consideró “insultos”, el empresario dijo que acordaron que a partir de este día no mendigaran más audiencias con los servidores públicos, algunos de ellos muy cercanos a la gobernadora.

“Hay funcionarios que no funcionan, funcionarios con doble plaza, estatal o federal, o municipal y estatal de primerísimo nivel que han dado a sus familiares más cercanos como esposas hermanos, tíos, privilegios como la renta de propiedades de cientos de miles de pesos”, dijo.

Sin dar nombres, Elías Azar dijo que hay funcionarios que solo realizan sus actividades institucionales en lugares y hoteles ostentosos, de lo que se quejaban anteriormente, y que no están dando resultados.

Afirmo que “detectamos toda una red de corrupción estatal”.

Añadió que hay “funcionarios que le dicen a los ciudadanos guerrerenses, que esta administración es de puertas cerradas, no lo decimos nosotros, lo dicen esos funcionarios. Son funcionarios que se tienen que ir”, recalcó.

Por ello, anunció la clausura del IGIFE el próximo 26 a las 11 horas, debido a que el titular en un inició los recibió y ofreció lanzar licitaciones de obras para que empresarios locales pudieran participar, pero no los ha vuelto a recibir después de ese compromiso.

Refirió que si un funcionario público no cumple, la ciudadanía puede solicitar su renuncia, ya que está al servicio de la población y son empleados del pueblo. 

Los funcionarios “están para servir, no para servirse, nadie votó por ellos; es facultad y responsabilidad de la gobernadora, quien debe velar por el buen funcionamiento de la vida administrativa del estado”, concluyó.